Santo Domingo, 30 de enero. El pasado 29 de enero, se rindió homenaje al Héroe Nacional cubano, por el 168 aniversario de su natalicio, en Montecristi; ciudad que atesora dos de los sitios más emblemáticos de la hermandad entre Cuba y República Dominicana, la Casa donde Martí y Gómez firmaron el Manifiesto de Montecristi, programa político de la guerra de Cuba de 1895-1897 y el monumento a Martí, ubicado en la playa por donde embarcó de regreso a Cuba para reiniciar la guerra.
El evento, clausuró la jornada organizada por la Embajada de Cuba con autoridades dominicanas y amigos de la solidaridad para conmemorar el nacimiento del Maestro, recordado en el transcurso de la semana en Barahona, Santo Domingo y Montecristi.
Ni la lluvia pertinaz ni la pandemia impidieron que las banderas de Cuba y República Dominicana ondearan y las notas de los himnos nacionales de ambas naciones fueran entonadas, previo al encuentro donde Martí fue recordado por sus valores personales, su humanismo, lealtad y su dimensión como estratega político, por lo cual es reconocido como uno de los pensadores latinoamericanos más trascendentales del siglo XIX.
La solidaridad entre las naciones caribeñas, fraguada por Martí y Gómez, es el legado más preciado para cubanos y dominicanos, y en las circunstancias tan difíciles que vive la humanidad tenemos la obligación de salvaguardarla, expresó, la Primera Secretaria de la embajada Elisabet M. Bordallo, lo cual fue ratificado por las autoridades locales.
Durante la visita, funcionarios del gobierno y representante de fuerzas políticas manifestaron el interés de preservar la memoria de Martí y Gómez en Montecristi y de trabajar en nuevos proyectos para estrechar vínculos entre los pueblos cubano y dominicano.
La delegación de la embajada que asistió al acto recibió el cariño y apoyo de todos los presentes, quienes de manera jocosa significaron que eran bienvenidos a Montecristi, no solo por haberles escogido para celebrar el natalicio de Martí, sino además, por haber llevado la lluvia, que desde hace muchos meses se había olvidado del territorio, pero es sinónimo de alegría y prosperidad como apreciamos será siempre nuestra amistad.
EmbaCuba Dominicana
