Esta mañana acudieron tres, pero en realidad son más de cien, los que guardan en su corazón recuerdos de Cuba, la Isla grande del Caribe. Viajaron en los 80 a estudiar las especialidades que más necesitaba su nación asiática: agronomía, veterinaria, lenguas extranjeras, entre otras. Ha sido el aporte cubano a la formación de profesionales de diversas latitudes, a pesar del bloqueo de los Estados Unidos contra La Habana. A más de 40 años del regreso a su tierra natal, estos hombres y mujeres cambodianos cuentan de sus experiencias en la isla de la Juventud, Pinar del Río y Camaguey, lugares que han vuelto a visitar cercados por las nostalgias de la juventud. Ellos han mantenido el compromiso de apoyar a Cuba, y aún hoy encuentran siempre un momento para evocaciones.