Diversas iniciativas conforman la jornada contra el bloqueo en Cambodia a las que se han sumado el Movimiento de Solidaridad con Cuba, colaboradores, cubanos residentes, claustro y estudiantes universitarios.
En la mayor elevación natural de la ciudad de Phnom Penh, Wat Non, se enarbolaron banderas de Cambodia y Cuba para respaldar el reclamo mundial por el cese del injusto bloqueo de los Estados Unidos contra la Isla, y la exclusión de la lista de patrocinadores del terrorismo.
Al pie de la también reconocida como Pagoda de la Montaña, el vicepresidente de la Asociación de Graduados Camboyanos en Cuba, Bun Therun, expresó el apoyo a pocas horas de que la Asamblea General de las Naciones Unidas examine el proyecto de Resolución “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los EEUU contra Cuba”.
Asimismo, la Embajadora de Cuba se reunió con un auditorio de estudiantes y profesores de la Universidad de Paññasatra, a quienes ofreció una explicación detallada del impacto del flagelo, cuyo carácter genocida ha afectado la vida de 11 millones de cubanos por más de 60 años. Añadió que, entre marzo de 2022 y febrero de 2023, el bloqueo causó daños y perjuicios a Cuba, por valores de 4 mil 867 millones de dólares. Esto representa-comentó- una afectación de más de 405 millones de dólares mensuales, más de 13 millones de dólares diarios, y más de 555 mil dólares por cada hora de bloqueo.
Los asistentes realizaron numerosas preguntas sobre la repercusión de ese instrumento unilateral en diversos sectores, entre ellos la salud. Con marcada emoción una estudiante de relaciones internacionales se interesó por saber qué se hacía en casos de no poder adquirir medicamentos esenciales, a lo que la embajadora respondió que los daños acumulados a los servicios en esta esfera ascendían a 3 mil 625 millones 840 mil 594 dólares, y constituía una de las expresiones más crueles en un área tan sensible como la salud humana.
Históricamente, Cambodia ha acompañado a Cuba en la lucha por el fin del bloqueo, expresado en reciente encuentro del primer ministro, Hun Manet, con la representante diplomática en el país del sudeste asiático.