Compañeras, Compañeros:
Fidel vive entre nosotros!!. Vive entre nosotros, porque la muerte no es verdad cuando se ha cumplido bien la obra de la vida, como dijera José Martí.
Deseo agradecer a la Asociación de Amistad Austria-Cuba (OKG) y a la Asociación de Cubanos Residentes “CubaVa” la organización de esta velada que bajo la convocatoria de “Una Noche para Fidel” rinde tributo póstumo al Comandante en Jefe y Líder histórico de la Revolución Cubana.
Fidel y su proeza de gigante dejó una huella imborrable en el siglo XX. Su desaparición física ha sido el acontecimiento político más importante de la última década para toda la simbología revolucionaria.
Hoy rendimos homenaje al Fidel que conocimos y que acompañamos en su larga lucha. Al Fidel de los oprimidos y los pobres de este mundo. Al Fidel de los que nunca se rinden y dan batalla. Al Fidel de todos los rincones del mundo. Al Fidel que tiene un lugar en la historia como paradigma de resistencia y dignidad, quien con su ejemplo inspiró las luchas de los pueblos en todo el mundo por la libertad y la justicia social.
Fidel consagró toda su vida a la solidaridad y encabezó una revolución socialista de los humildes, por los humildes y para los humildes. Siguiendo los pasos de Bolivar y Martí, junto al Che y los jóvenes rebeldes, arropó tras sí a todo un pueblo sediento de libertad, que derrotó a la brutal dictadura batistiana y forjó la más profunda Revolución de nuestros tiempos, símbolo de resistencia y dignidad, símbolo también de la lucha anticolonialista, anti apartheid y antiimperialista, por la emancipación y liberación de los pueblos.
En el continente más desigual del planeta, en la América Latina y el Caribe, a los cubanos y cubanas nos dejó un país con cero desnutrición infantil y sin niños de la calle, con la esperanza de vida más alta y un ciento por ciento de escolarización y acceso a la salud. Definió para Cuba un nuevo concepto de nación y con ello nos dejó también una Patria más grande y más libre, porque es más culta. Más digna porque se nos reconoce y respeta, porque no andamos más de rodillas ni mendigando favores, porque aprendimos el valor de la palabra solidaridad. A todos y todas nos deja su concepto de Revolución, el saber que la lucha por las transformaciones económicas y sociales es una batalla permanente que conlleva sacrificios y voluntad, y QUE SI SE PUEDE cambiar el mundo, derrotando al capitalismo salvaje que nunca ha tenido rostro humano.
Así como en la vida nos posicionó en definiciones y caminos, su muerte fue el cortafuegos ante el cual nadie pudo pasar inadvertido. No hay ser humano ni Revolución alguna que no tenga detractores, de lo contrario no seríamos humanos ni tendríamos Revoluciones. Fidel y la Revolución Cubana han trascendido el tiempo y los espacios. Quien no alzó su voz ahora no lo hará nunca. La actitud que cada quien tomó ante la muerte de un hombre universal con un legado histórico incuestionable dice mucho de cada persona y de cada organización. Los silencios y ambigüedades dicen mucho también, y los escuchamos en algunos que terminaron fallando la prueba.
Paso por alto el repugnante espectáculo de Miami, devenida en la cloaca de los marginales del capitalismo, porque la respuesta la dieron los millones de cubanas y cubanos, que desde el occidente hasta el oriente rindieron póstumo tributo a Fidel. Esa respuesta se multiplicó en cada rincón del mundo donde millones de personas sintieron el enorme vacío de su pérdida
Nosotros seguiremos luchando por nuestros sueños y utopías. Seguiremos construyendo el Socialismo y la Patria Grande de la que nos habló Martí. Seguiremos andando el largo camino en la incesante forjación del Hombre Nuevo, que liberado del miedo y el temor, sea capaz de librar con audacia, organización y conciencia, la lucha permanente de las ideas liberadoras hasta conquistar toda la justicia en un mundo de paz e igualdad.
Por eso decimos ¡Hasta Siempre Comandante! ¡Hasta la Victoria Siempre!
(Embacuba Austria)