La educación es un instrumento clave en la promoción de la paz y el desarme. Cuba apoya la necesidad de instruir a la población, y especialmente a los jóvenes, en los principios de respeto a la paz. La educación vinculada al objetivo del desarme y la no proliferación, debe ser una prioridad de todos los Estados.
Cuba enfrenta los efectos negativos de las culturas de violencia y el falso sentimiento de seguridad ante los peligros actuales en esta esfera. Incluye en sus programas de educación y capacitación a largo plazo para niños y jóvenes, una cultura de paz que favorece el desarme general y completo sin abandonar la defensa del país y en cumplimiento de los instrumentos internacionales sobre la materia, de los que somos parte.
Los arsenales nucleares comprometen la paz y la seguridad internacionales y constituyen una amenaza para el futuro de la humanidad. Por ello, Cuba considera que el desarme nuclear es un objetivo de la mayor prioridad y en consecuencia ha firmado y ratificado con celeridad el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares.
No existe justificación para que en las doctrinas militares se contemple el uso de este tipo de armamento. Celebramos que el nuevo tratado incluya también la prohibición de la amenaza de uso de las armas nucleares.
La sociedad cubana ha ido ganado en conocimiento sobre las cuestiones relativas al desarme, la no proliferación y el mantenimiento de la paz. Los medios de difusión masiva han preparado mensajes de bien público sobre el tema, especialmente en ocasión de la Conmemoración del Día Internacional para la Total Eliminación de las Armas Nucleares, el 26 de septiembre de cada año.
Los centros educacionales en Cuba, dentro de su labor formadora, contribuyen a que los estudiantes tomen conciencia de la importancia de la paz, el desarme y la no proliferación. Específicamente, en los centros cubanos de educación militar, donde se forman oficiales de nivel superior, medio y básico en perfiles técnicos y de mando, se desarrollan cursos académicos sobre la materia.
Las organizaciones no gubernamentales cubanas tienen, igualmente, un papel importante en la educación para el desarme. El Movimiento Cubano por la Paz y la Soberanía de los Pueblos, de conjunto con la Sociedad Económica de Amigos del País, organizan, desde hace cerca de 20 años, Talleres Nacionales de Educación para la Paz en diferentes centros del sistema nacional de enseñanza. Asimismo, la Asociación Cubana de Naciones Unidas organiza frecuentes eventos sobre esta materia.
El líder histórico de la Revolución cubana, Comandante en Jefe Fidel Castro, fue un promotor, a nivel nacional e internacional, de la lucha contra las armas nucleares. En múltiples artículos y discursos se refirió a las implicaciones que tendría el empleo de tales armas para la estabilidad mundial y la vida del planeta.
Cuba considera que la educación para la paz y el desarme es determinante para garantizarles a las nuevas generaciones un futuro más seguro. Un mañana donde no continúen creciendo los presupuesto militares para hacer las guerras y donde los adelantos de la ciencia y la técnica estén en función de lograr un desarrollo sostenible. (Misión Permanente de Cuba en Naciones Unidas)