El Gobierno Revolucionario denuncia la escalada de acciones del gobierno de los Estados Unidos para justificar una agresión militar contra la República Bolivariana de Venezuela.
La acumulación e incremento de medios y efectivos militares en el mar Caribe, el uso de la fuerza para atacar embarcaciones civiles y asesinar a sus tripulantes y la intercepción y detención injustificadas de una nave, en violación de normas internacionales, confirman la naturaleza hostil e irresponsable de la operación en curso.
La Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales En Defensa de la Humanidad (REDH), y los y las participantes en el encuentro «Soberanía, Imperialismo y Pensamiento crítico en nuestra América», reunidos en Caracas, los días 4 y 5 de septiembre de 2025, como resultado del debate, el intercambio y el diálogo comprometido con los destinos de nuestros pueblos:
Declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores
El Gobierno cubano rechaza enérgicamente el actual despliegue de fuerzas militares de Estados Unidos en el mar Caribe. Este acto peligroso representa una grave amenaza y una agresiva demostración de fuerza que atenta contra la soberanía y la autodeterminación de los pueblos de América Latina y el Caribe. Ignora, además, el compromiso de los 33 países miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños al proclamar a la región como Zona de Paz.
Declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores
El Gobierno cubano rechaza enérgicamente el actual despliegue de fuerzas militares de Estados Unidos en el mar Caribe. Este acto peligroso representa una grave amenaza y una agresiva demostración de fuerza que atenta contra la soberanía y la autodeterminación de los pueblos de América Latina y el Caribe. Ignora, además, el compromiso de los 33 países miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños al proclamar a la región como Zona de Paz.
Estados Unidos trata de imponer violentamente una nueva división del mundo, en la que una parte estaría conformada por los que se plieguen a sus dictados, mediante la realización de concesiones económicas, territoriales o de seguridad; y, por otra, los que serán objeto de coerción y agresión, por negarse a ser sometidos y defender la igualdad soberana y su derecho a la libre determinación.