Hoy 6 de octubre de 2023, conmemoramos uno de los actos terroristas más diabólicos cometidos hace 47 años, organizado, financiado y ejecutado por el gobierno de los Estados Unidos de América y sus agentes, contra nuestro hermano país, que fue la destrucción en pleno vuelo de la aerolínea Cubana CU-455, frente a las costas de Barbados, con la pérdida de 73 vidas inocentes de ciudadanos cubanos, guyaneses, norcoreanos....
Este vil acto, se unió a una larga lista de acciones terroristas 713, que se ha tramado en suelo estadounidense, en nuestro último recuento, desde el triunfo de la revolución cubana en 1959 encabezada por su líder histórico Fidel, que incluyó bombardeos, guerra bacteriológica, tortura y asesinato de civiles, invasión mercenaria y atentados contra la vida de sus líderes. Además, la imposición de un bloqueo económico genocida desde 1962, diseñado para matar de hambre a la población cubana hasta la sumisión, que ha contado con la aprobación de sucesivos presidentes estadounidenses.
El coste para la sociedad cubana de estas acciones terroristas ha sido inmenso, 3478 muertos, 2099 heridos (algunos mutilados de por vida) y económicamente más de 181 mil millones de dólares en lo que es una guerra de agresión no declarada, que irónicamente ni un solo ciudadano de EE.UU. puede reclamar haber sido dañado por el gobierno cubano de manera similar.
Sin embargo, Cuba está incluida en una dudosa lista de Estado Patrocinador del Terrorismo, por el principal culpable, que con esta designación, extiende el bloqueo económico, financiero y comercial, ya que impide a este campeón de la solidaridad, el acceso a capital para el desarrollo, materias primas, tecnología, alimentos y otros insumos clave, que son necesarios para su existencia cotidiana...
También debemos ser conscientes del hecho de que, durante los últimos 31 años de reuniones consecutivas de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), la inmensa mayoría de los ciudadanos de la humanidad han votado a favor de la eliminación incondicional de esta crueldad anacrónica y bárbara, siendo los EE.UU. y su representante Israel la pareja extraña que apoya su mantenimiento.
En la mejor tradición de nuestro pueblo caribeño, al recordar a nuestros 73 hermanos y hermanas cuya sangre inocente fue derramada por un imperio moribundo, Cuba no está sola.
Seguiremos junto a ustedes en las trincheras o donde nos lleve la lucha Resistiendo, venciendo y transformando Un amor y una lucha.
Trevor Brown
Presidente