Asunción, 21 de mayo de 2024. Al diseminarse en las redes sociales el mal intencionado informe de EEUU con la más reciente y ambigua manipulación anticubana, que a su vez generó la oportuna y digna respuesta de la Cancillería cubana, el destacado intelectual y ensayista paraguayo, Carlos Verón de Astrada, se motivó a escribir un sustantivo artículo cuyo contenido íntegro reproducimos seguidamente por su valor solidario y esclarecedor, contribuyendo a que la opinión pública no se confunda ante tanta ignominia imperial.
EEUU de contramano a la historia.
Contrario a toda elemental lógica y a la Comunidad Internacional, que se viene pronunciando desde hace ya muchos años en el seno de Naciones Unidas contra de las arbitrarias sanciones a Cuba por parte de EEUU, potencia que sigue con la obsesión enfermiza de estrangular al pueblo de ese hermano país en su esforzado intento de autodeterminarse desde hace más de sesenta años.
Después de los daños provocados por todos los bloqueos imaginables e inimaginables, no contento con ello, el último recurso malsano, es el incluir a Cuba en una arbitraria lista de países patrocinadores del terrorismo. Qué absurda y perversa paradoja, que una potencia cuya expansión bélica hegemónica en todo el mundo, con miles de bases militares instaladas a lo largo y ancho del planeta, ya haya costado y sigue costando tantas vidas, potencia que a la fecha es la única que descargó dos bombas atómicas sobre dos ciudades inermes japonesas. Y ni hablar de las vidas que costaron las guerras de Corea y Vietnam y muchas otras intervenciones bélicas de EEUU en el mundo.
Y el último burdo recurso que tiene el claro e infame propósito de confundir a la opinión pública, es el informe enviado por el Dpto. de Estado al Congreso el 15 de mayo reportando que en el calendario 2023 no se incluirá a Cuba en "la lista de países que no colaboran plenamente con los esfuerzos antiterroristas de los EEUU".
Se impone aclarar que esa es otra lista, unilateral e infundada, con la que se ha pretendido calumniar a Cuba, país que mientras tanto, sigue incluida en la espuria lista del propio Departamento de Estado de países que supuestamente patrocinan el terrorismo.
Pero a propósito de patrocinio al terrorismo, en la actualidad, la paradoja es más absurda aún. Porque EEUU apoyó y sigue apoyando, financiando y enviando armas al mayor terrorista mundial en el presente como es el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. La calificación de terrorista al Estado de Israel por el genocidio perpetrado en Gaza, también viene de la gran mayoría de la Comunidad Internacional desde el seno de NNUU. Lo último es la orden de captura al gobernante israelí por parte de la Corte Penal Internacional.
Todo este macabro y terrorista escenario provocado por EEUU, contrasta de forma tajante con un pequeño Estado caribeño como es Cuba, cuyo gran "pecado" es intentar ser artífice de su propio destino. Y desde esa perspectiva ha demostrado en múltiples situaciones su solidaridad con muchos pueblos del mundo, como fue en la pandemia cuando incluso con países europeos como Italia, llevó su mano solidaria para ayudar a salvar vidas.
Todo el mundo democrático y humanista debería solidarizarse una vez más con un pueblo digno como es el cubano. Como así también, llamar la atención del peligro para la humanidad que comporta una potencia en derrumbe que en su caída pone en riesgo la existencia humana en el mundo.
Carlos Verón De Astrada
Paraguay