La decisión del Presidente de los Estados Unidos de anular una parte importante de las medidas que su predecesor había tomado en relación con la normalización de relaciones diplomáticas y comerciales con la Republica de Cuba, supone una vuelta a las fracasadas e ilegales políticas de injerencia en la isla que habían ejecutado los EE.UU. desde 1959 hasta 2014.
La presentación de esta decisión en un acto celebrado en Miami, donde Trump aparecía rodeado de los mercenarios que en 1961, fracasaron en su intento de invadir Cuba desembarcando en Playa Girón en una operación organizada por la CIA, supone una nueva demostración de la voluntad de los EEUU de recuperar las viejas y agresivas practicas imperialistas, recurriendo al uso de la fuerza y la injerencia en las relaciones internacionales.
El lenguaje belicoso y bravucón que utiliza el Presidente de los EEUU frente al resto de la comunidad internacional evidencia una política incompatible con la pertenencia de los Estados Unidos a la comunidad de naciones civilizadas. El desprecio a la diplomacia y a las normas de respeto a la soberanía nacional de otros países manifiesta la decisión de la actual administración presidencial de los EEUU de imponerse por la fuerza al resto del Planeta, lo que supone un serio peligro para el presente y futuro de la humanidad.
Esta nueva agresión de Trump contra Cuba se realiza de forma coordinada con la ofensiva imperialista que desde la administración norteamericana se desarrolla contra los procesos de construcción de una América Latina soberana, democrática, prospera, sostenible y socialmente avanzada.
Volver a recuperar medidas de bloqueo y boicot económico, que se han demostrado inútiles y fracasadas durante más de cincuenta años, para derrotar la revolución cubana tiene también el objetivo de contentar a la extrema derecha cubana exiliada en los EEUU, que ha apoyado la elección presidencial de Trump, obviando los intereses de las nuevas generaciones de cubanos crecidos en la emigración en los EEUU, quienes también se verán perjudicados por este nuevo paquete de medidas injerencistas.
El Presidente de los EE.UU. justificó esta vuelta a las antiguas políticas de injerencia supuestamente en defensa de los derechos humanos y exigiendo la renuncia de Cuba al socialismo. El PCE denuncia el cinismo de Trump, resaltando que Cuba hoy día es uno de los países de América Latina donde más estrictamente se cumplen y respetan los derechos humanos, especialmente los derechos sociales, económicos, culturales y medio ambientales, como lo ponen de manifiesto la excelente calidad de la salud o la educación, la igualdad de salario por igual trabajo entre hombres y mujeres, la defensa de una vida digna para toda la población. Recordamos a Trumnp que Cuba se encuentra hoy día por delante de los EEUU tanto en esperanza de vida como en baja mortalidad infantil.
Cuba es hoy el mayor ejemplo de solidaridad internacional como en innumerables ocasiones han resaltado las Naciones Unidas. Son los EEUU quien exportan militares y bombas a innumerables países en conflicto, mientras Cuba, a pesar de sus limitados recursos agravados con el bloqueo, envía a estos mismos países médicos, profesores y alimentos.
La Asamblea General de la ONU aprobó el pasado 26 de octubre una resolución que solicitaba el levantamiento del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos contra Cuba. Las resolucion obtuvo el apoyo de 191 de los 193 Estados miembros y ningún voto en contra. Con la decisión adoptada en el día de ayer, la administración USA y su Presidente actúan en contra del criterio unánime de la comunidad internacional, despreciando la legalidad internacional y a las NNUU.
Pedimos a las NNUU que haga cumplir sus resoluciones y solicite a los EEUU acabar con cualquier medida que signifique bloqueo económico o boicot comercial a Cuba, por tratarse de medidas ilegales, injustas y criminales, que no sólo causan daños al pueblo cubano, sino que afectan directamente a terceros países y, de forma muy especial, a España que es el primer inversor extranjero en la industria turística cubana.
El Partido Comunista de España pide al Gobierno de Rajoy que traslade ante las Instituciones Internacionales la necesidad de que se actúe urgentemente para obligar al Presidente Trump a dar marcha atrás en su camino de volver a la política de injerencia y agresión hacia la Republica de Cuba.
Al mismo tiempo el Partido Comunista de España muestra su total solidaridad con el Pueblo Cubano en la defensa de su revolución, con su forma de vida, en la defensa de su dignidad. En tiempos difíciles es más necesario que nunca mostrar la unidad de quienes luchamos por un mundo más justo, más libre, para quienes la Revolución de Cuba es todo un ejemplo. Por ello nos comprometemos a realizar una campaña de solidaridad en todo el territorio del Estado, poniendo de manifiesto la solidaridad del pueblo español con el pueblo cubano
Siempre tendremos presente el ejemplo de Fidel Castro encabezando las demostraciones masivas de la voluntad de toda Cuba de defender, su independencia, su dignidad, es decir su Revolución, frente a agresiones exteriores.
Madrid, 17 de junio de 2017