Estimados embajadores y representantes del cuerpo diplomático de Latinoamérica y del Caribe,
Estimados colegas y amigos de la Asociación de Amistad Austria-Cuba,
Un 28 de enero de 1853 nació en La Habana José Julián Martí Pérez, el Héroe Nacional de Cuba, y hoy nos reunimos frente a su busto en esta plaza latinoamericana, para rendirle tributo.
Martí fue diplomático, escritor, político, filósofo, periodista y pensador. Hizo política desde su prosa, fundó el Partido Revolucionario Cubano, escribió un libro para niños, su pluma se leyó en los principales medios gráficos del continente y dejó un importante legado literario basado en poemas y ensayos.
Además, fue un fiel seguidor de las ideas emancipadoras de "El Libertador", Simón Bolívar, amante de la libertad del hombre, de la tierra en la que nace, de los sueños de independencia y de una América unida.
Durante toda su corta y fructífera vida dedicó todos sus esfuerzos a la liberación de Cuba del yugo colonial español, aunque mantuvo como una prioridad a largo plazo la mejora de la humanidad.
No es casual que junto a la Asociación de Amistad Austria-Cuba hayamos convocado a las embajadas de nuestro continente: José Martí, más allá de ser un cubano, fue un hombre de América toda.
Varios aspectos influyeron sin dudas en la concepción latinoamericanista de José Martí, pero sin dudas estuvo fuertemente influenciada por su estancia en varios países del continente, como Guatemala, México, Honduras, Venezuela, Haití, Costa Rica, Panamá, y República Dominicana; el estudio de sus culturas e historias, así como por los aproximadamente 15 años que vivió en Estados Unidos. Eso sin contar que también se desempeñó en ocasiones como Cónsul de la Argentina, Uruguay y Paraguay.
Más de un siglo después de su muerte en combate, Martí y sus ideas conservan plena vigencia. Los desafíos siguen siendo, en buena medida, aquellos que conoció y avizoró el prócer independentista cubano: la tarea pendiente de completar el desarrollo económico, social, cultural y ambientalmente sostenible de nuestras repúblicas americanas.
El pensamiento de José Martí es clave para entender los procesos que vive la América Latina actual y comprender muchos problemas del mundo.
Como nos enseñó Martí, sólo la alianza de todas las fuerzas en la región permitirá establecer un plan de integración regional basado en la solidaridad, la reciprocidad, la justicia social, la preservación de la cultura y la paz.
Nuestros países viven una hora crucial. El desafío no es nada fácil. Sin la unidad, América Latina no podrá construir su futuro, libre e independiente.
Nuestra América vive días intensos. No hay motivo, ni tiempo, para el desaliento.
En momentos en que la historia se repite, recordemos una vez más lo escrito por José Martí en su ensayo “Nuestra América”, cuando alerta sobre el vecino que desconoce y desdeña a los pueblos del continente, pero también insta a la unidad como estrategia urgente para hacerse valer. “(…) los árboles se han de poner en fila, para que no pase el gigante de las siete leguas! Es la hora del recuento, y de la marcha unida, y hemos de andar en cuadro apretado, como la plata en las raíces de los Andes”.
Muchas gracias.