Señor Presidente:
Cuba defiende los principios de respeto mutuo, la verdad, la justicia, la universalidad, la imparcialidad y la no selectividad como única vía para la promoción y protección de todos los derechos humanos.
Debe otorgarse mayor prioridad y visibilidad a la solución de problemas como la extrema pobreza, el analfabetismo, la falta de acceso a derechos básicos como la salud, la educación y la alimentación, entre otros, que caracterizan el injusto orden económico internacional.
Reafirmamos nuestro compromiso de continuar promoviendo la cooperación internacional en materia de derechos humanos.
Señor Presidente:
La ejecutoria ejemplar de Cuba en esta materia desmiente cualquier manipulación en contra de mi país, como sucede con la intervención realizada por la delegación de Estados Unidos, la cual es un ejemplo del enfoque arrogante y de confrontación que en nada contribuye a la promoción y protección de los derechos humanos.
Estados Unidos carece de moral para dar lecciones en materia de derechos humanos. Tiene un patrón de violaciones sistemáticas de todos los derechos humanos, que incluye el uso de la tortura, la detención y la privación de libertad arbitrarias, como ocurre en la Base Naval en Guantánamo, territorio ilegalmente ocupado a nuestro pueblo; el asesinato y maltrato de afroamericanos por policías; la muerte de civiles por sus tropas de intervención y ocupación; el aumento de las ideas supremacistas, la discriminación racial y la xenofobia; y el encarcelamiento de niños migrantes.
Señor Presidente,
Cuba siempre se ha opuesto a enfoques e iniciativas selectivas contra países en desarrollo, en particular aquellas que descansan en motivaciones políticas e intereses hegemónicos de algunas potencias y que atentan contra la cooperación en el ámbito de los derechos humanos.
Consideramos que el mecanismo del Examen Periódico Universal del Consejo de Derechos Humanos es el instrumento apropiado para tratar la situación de derechos humanos en todos los países sin distinción, ni politización.
Cuba se opone a la certificación de países a través de listas unilaterales como las publicadas por Estados Unidos en materia de supuestas violaciones de derechos humanos. Estas prácticas son contrarias al Derecho Internacional y la Carta de las Naciones Unidas y solo persiguen justificar las acciones de agresión y las medidas coercitivas unilaterales contra países en desarrollo.
Las mayores violaciones de los derechos humanos han sido perpetradas por los Estados Unidos. Las páginas de oprobio contienen las bombas atómicas lanzadas en Hiroshima y Nagasaki, las guerras de agresión y conquista, las cárceles y vuelos secretos, el secuestro de seres humanos, la existencia de campos de concentración donde se practica la tortura y otras graves violaciones, o las ejecuciones extrajudiciales con el uso de drones, entre otros lamentables ejemplos.
Señor Presidente:
Condenamos enérgicamente las agresiones de todo tipo y en particular el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de los Estados Unidos contra Cuba por más de 50 años. El bloqueo constituye la principal violación de los derechos humanos de todos los cubanos y cubanas y un acto contrario al espíritu y la letra de la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional.
Concluyo reiterando que la realización efectiva de todos los derechos humanos, el respeto a la diversidad cultural, a las diferentes religiones y creencias; a la diversidad de sistemas políticos, económicos y sociales; y al derecho a la libre determinación de los pueblos debe ser la piedra angular de nuestras acciones.
Muchas gracias