74 AGNU: Réplica de la Delegacion de Cuba en el marco de la Primera sesión regular de la Junta Ejecutiva de UNICEF. Adopción del Programa País para Cuba de UNICEF. Nueva York, 12 de febrero de 2020

Señor Presidente:

Cuba lamenta que la delegación de Estados Unidos intente, una vez más, politizar la labor de la Junta Ejecutiva, en este caso, en el proceso de adopción del Documento de Programa País para Cuba del UNICEF.

Una vez más se intentan alterar las prácticas y métodos de trabajo de este órgano y se desvía la atención de lo que debería ser la esencia de los debates en esta sala: abogar por la protección de los derechos de los niños, ayudar a satisfacer sus necesidades básicas y ampliar sus oportunidades de alcanzar su pleno potencial.

El impacto del Bloqueo no es una invención de Cuba. Provoca daños humanitarios incalculables, constituye una violación flagrante, masiva y sistemática de los derechos humanos del pueblo cubano, incluido de nuestros niños y niñas y adolescentes. Una inhumana e ilegal política que la Asamblea General de la ONU rechaza por abrumadora mayoría cada año. Los daños acumulados por el bloqueo durante casi seis décadas alcanzan la cifra de 922 000 millones de dólares.

Esta criminal política impacta particularmente en la salud y el bienestar de nuestros niños, niñas y adolescentes. Entorpece la adquisición de tecnologías, materias primas, reactivos, medios de diagnóstico, equipos y piezas de repuesto, así como medicamentos para el tratamiento de enfermedades graves, como el cáncer

Los fármacos para su tratamiento son los más complejos y caros a nivel mundial y hay un grupo de ellos, sobre todo de inmunología para el cáncer, cuyas principales fuentes son fármacos y farmacias estadounidenses a las que no tenemos acceso. Estos insumos deben obtenerse en mercados lejanos, en muchas ocasiones, mediante intermediarios, lo que incrementa sus precios o resulta inviable.

Entre abril de 2018 y marzo de 2019, el daño al sector de la salud cubano ascendió a más de 104 millones dólares, cifra superior en más de 6 millones a la del año anterior. Desde 1962 hasta la fecha, las afectaciones a la salud pública cubana, como consecuencia del bloqueo impuesto desde hace casi 60 años, ascienden a casi 3.000 millones de dólares.

La cooperación con el UNICEF ha sido afectada por el recrudecimiento del bloqueo norteamericano. Las restricciones comerciales impuestas a Cuba han afectado la compra de suministros para niños, niñas y adolescentes en el marco del Programa de País 2014-2019. El acceso al mercado estadounidense reduciría los costos de dichas operaciones, a la vez que acoatría los tiempos en los procesos de compra.

El bloqueo es el principal obstáculo al desarrollo económico y social de Cuba, así como a la implementación del Plan Nacional de Desarrollo Económico y, por ende, a la implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

Sr Presidente,

El Gobierno de los Estados Unidos de América ofrece sesgados comentarios sobre supuestas licencias para operaciones de ventas de medicamentos y alimentos a Cuba, que muy difícilmente llegan a concretarse.

La delegación de Estados Unidos conoce perfectamente las leoninas condiciones que impone a las compras cubanas: no hay acceso a créditos, ni oficiales ni privados, se debe pagar al contado cuando la mercancía llega a puerto, se persigue a los bancos que manejan nuestras transacciones, no se pueden utilizar embarcaciones cubanas, entre otras medidas.

El Gobierno de los Estados Unidos de América no está en condiciones de criticar a Cuba o país alguno en materia de derechos humanos. Rechazamos la reiterada manipulación de estos con fines políticos y los dobles raseros que le caracterizan.

Estados Unidos no es parte de la Convención sobre los Derechos del Niño.

En el país más rico, 40 millones de estadounidenses viven en condiciones de pobreza, de ellos, 18,5 millones en pobreza extrema, incluidos niñas y niños.  Más de medio millón de sus ciudadanos duermen en las calles.

Es condenable la separación de familias migrantes y la separación de los padres y detención indefinida de más de 2 500 niños, y la deportación de 21 000 de estos.

El bloqueo viola también los derechos humanos y las libertades civiles de los ciudadanos estadounidenses, a quienes limita, injusta y arbitrariamente, la libertad de viajar a Cuba, único destino prohibido para ellos en el mundo.

Sr. Presidente,

Sobre la supuesta existencia de detenciones arbitrarias, reiteramos que en Cuba no se practican detenciones arbitrarias. Las detenciones se realizan de acuerdo al procedimiento penal vigente y cumpliendo las amplias garantías del debido proceso que establece nuestro ordenamiento jurídico.

Las detenciones se realizan cumpliendo todas las garantías y formalidades establecidas en la Ley, independientemente de la opinión política del arrestado, cumpliendo todas las garantías y se sustenta en la aplicación de una política penal racional, objetiva, preventiva e individualizada.

Con relación a los falsos cuestionamientos sobre el proceso democrático que condujo a la aprobación de la nueva Constitución de Cuba, debemos señalar que este fue un proceso en el que participaron 8 millones 945 mil 521 personas, de una población de poco más de 11 millones y cuyo documento final fue ratificado por referéndum popular mediante el voto favorable del 86,85% de los votantes. 

Sr. Presidente,

Permítame finalizar renovando el compromiso de Cuba con el UNICEF y con la implementación del nuevo Programa País, lo cual consideramos una modesta contribución al fortalecimiento del multilateralismo y la cooperación internacional.

Muchas gracias.