Sr. Presidente:
En nombre del gobierno y pueblo cubanos, le saludo a Usted y a las distinguidas personalidades que participan, en esta 65 sesión de la Comisión de la Mujer, marcada por los efectos que impone la pandemia de la COVID-19.
En este contexto, Cuba, impulsa el perfeccionamiento de su modelo económico y social, inmersa en su lucha tenaz para eliminar toda forma de discriminación, a pesar de los efectos nocivos del bloqueo económico, financiero y comercial, impuesto por el gobierno de Estados Unidos que denuncio ante Usted, principal obstáculo para el desarrollo y la plena realización de los derechos humanos de las mujeres, quienes conciben a la Revolución como el principal programa de igualdad.
Los derechos de las cubanas, refrendados en la Constitución de la República, refuerza el compromiso del Estado con el principio de igualdad y no discriminación. Las protege de la violencia en cualquiera de sus manifestaciones, tal como lo refieren los artículos 42,43 84,85 y 86 específicamente.
Sr. Presidente:
Las cubanas somos sujetas activas de derechos, protagonistas del proceso social cubano y disfrutamos de autonomía.
En la autonomía económica, a pesar de las brechas que aún subsisten, Cuba muestra resultados. La tasa de actividad económica femenina es de 53,2%, superior al año precedente, el 67, 4% del personal de educación, más del 70% de los jueces profesionales y fiscales. Representan el 70,4% de los ocupados en la actividad de Salud y Asistencia Social. Son el 62% de los médicos y el 64,2% del personal que presta hoy servicios de colaboración médica, en varios países del mundo.
Las mujeres han sido protagonistas en el diseño de los protocolos de actuación para el enfrentamiento a la pandemia, en el desarrollo de más de 900 proyectos de investigación e innovación, entre ellos los 5 candidatos vacunales, dos de los cuales se encuentran en la última fase del ensayo clínico.
En los niveles de toma de decisión y en la vida política la participación de las mujeres crece. Entre los dirigentes del Estado y gobierno, al cierre de 2020, se alcanzó el 51,5 %; en el Parlamento representan el 53,22 %; en los gobiernos locales, el 54,35% de quienes ocupan las presidencias y vicepresidencias y el 37, 5 % de los intendentes. No obstante, se sigue trabajando sobre la brecha de género que aún se manifiesta en los cargos decisorios, sobre todo a nivel empresarial.
Destaca en el orden legislativo la aprobación del Programa Nacional para el Adelanto de las Mujeres (PAM), que actualiza el existente e integra acciones que responden a la Plataforma de Acción de Beijing, a la CEDAW y a la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
Este Programa de Gobierno, ratifica el compromiso del Estado cubano con la igualdad de género, profundiza en la legislación y en la actualización del marco normativo, así como en los sistemas de protección contra todas las formas de discriminación y violencia. En este sentido ha sido intensa la labor desarrollada:
- Se amplió el servicio de consejería telefónica, incorporando la Línea Ayuda 103, como apoyo psicológico a toda la población, en particular a las mujeres, que demandan orientación y acompañamiento, por conocer o vivir situaciones de violencia.
- Se aprobó una Estrategia de capacitación para el personal que brinda servicios telefónicos de atención a la violencia de género a través de una Guía Básica, que constituye un valioso instrumento metodológico.
- Se puso en práctica una Metodología que actualiza y perfecciona los protocolos de actuación para la prevención y atención institucional a la violencia basada en género.
- Organismos como el TSP, el MINJUS, FGR, y la FMC unen saberes para actualizar la legislación vigente en relación a este tema, de manera que cubra los vacíos identificados.
Sr. Presidente:
Cuba, reitera su disposición de cumplir con los compromisos contraídos, en materia de igualdad de género. Patentiza su decisión de continuar el proceso de perfeccionamiento de su modelo económico y social, que incluye la consolidación de la institucionalidad, basada en la justicia, la igualdad y la solidaridad, como condición indispensable para el adelanto y empoderamiento de las mujeres y las niñas.
Muchas Gracias.