75 AGNU: Intervención de la delegación de la República de Cuba. Debate temático sobre “Desarme y seguridad regional”. Primera Comisión. Nueva York. Octubre de 2020.

Señor Presidente:

Reiteramos nuestro compromiso con el multilateralismo, como principio básico de las negociaciones en materia de desarme y control de armamentos. Al mismo tiempo, otorgamos gran importancia a las iniciativas regionales y subregionales en esa esfera.

Al pertenecer a la primera área densamente poblada en el mundo declarada como Zona Libre de Armas Nucleares, Cuba reconoce que el establecimiento de zonas libres de estas armas son una contribución eficaz al mantenimiento de la paz y la seguridad regional y mundial, fortalecen el régimen de no proliferación nuclear y contribuyen a la consecución del objetivo del desarme nuclear.

Hacemos un llamado a las potencias nucleares para que actúen bajo las responsabilidades que les compete, respeten el estatuto de las Zonas Libres de Armas Nucleares y retiren de inmediato sus reservas y declaraciones interpretativas a los Tratados que establecen zonas desnuclearizadas.

Estados Unidos es el único estado poseedor que no ha ratificado los Protocolos del Tratado de Rarotonga, ni los Protocolos I y II de Pelidaba y mantiene declaraciones interpretativas a los Protocolos Adicionales I y II del Tratado de Tlatelolco.

Apoyamos decididamente el establecimiento de Zonas Libres de Armas Nucleares en diferentes países o regiones del mundo. En este sentido, reiteramos la importancia de la aplicación de la resolución sobre el Oriente Medio, aprobada en la Conferencia de Examen y Revisión del Tratado en 1995, con el fin de promover y garantizar la paz y la estabilidad a nivel regional e internacional. Apoyamos, además, la decisión 73/546 de la Asamblea General y la Conferencia sobre el establecimiento de una zona libre de armas nucleares y otras armas de destrucción en masa en el Medio Oriente.

Expresamos profunda preocupación por las graves consecuencias de la retirada unilateral de Estados Unidos del Acuerdo Nuclear con Irán para la estabilidad y la seguridad en el Medio Oriente.

América Latina y el Caribe, fue la primera área densamente poblada en el mundo que se declaró como Zona Libre de Armas Nucleares, por medio del Tratado para la Prohibición de las Armas Nucleares en América Latina y el Caribe (Tratado de Tlatelolco). Estamos convencidos de que el establecimiento de Zonas Libres de Armas Nucleares reconocidas internacionalmente, fortalece la paz y la seguridad internacionales, así como el régimen de no proliferación y constituye una contribución importante para el logro del desarme nuclear.

Señor Presidente:

Hoy nos enfrentamos a múltiples amenazas, pero la política del actual gobierno de los Estados Unidos es la principal amenaza a la paz, la seguridad y la cooperación entre los países de América Latina y el Caribe. En momentos en que nos enfrentamos al reto global que impone la COVID-19, intentan avanzar sus intereses de dominación, políticas unilaterales e injerencistas que buscan desestabilizar, atizar y promover conflictos.

Continuaremos exigiendo el respeto al Derecho Internacional, a la Carta de las Naciones Unidas y a la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz; así como el apego al multilateralismo en las negociaciones de desarme, incluida la preservación y fortalecimiento de su maquinaria.

Muchas gracias.