76 AGNU: Intervención de la delegación cubana en el debate con la Presidenta del Consejo de Derechos Humanos, Sra. Nazhat Shameem Khan, en el plenario de la AGNU. Nueva York, 29 de octubre de 2021

Señor presidente,

Mi delegación respalda la intervención de la República Bolivariana de Venezuela, en nombre del Grupo de Amigos de la Carta de las Naciones Unidas. Permítame apuntar algunos elementos en capacidad nacional.

La selectividad, las prácticas punitivas, los dobles raseros y la manipulación política, en particular contra países del Sur, impiden a la comunidad internacional avanzar en materia de promoción y protección de todos los derechos humanos para todas las personas.

Estas prácticas sólo generan confrontación y no mejoran la situación de los derechos humanos en el terreno. Además, ya provocaron la desaparición de la Comisión de Derechos Humanos. Sin embargo, no se ha aprendido la lección, puesto que estas prácticas son cada vez más comunes en las labores del Consejo de Derechos Humanos y amenazan con deslegitimarlo.

Observamos con preocupación que se pretenda usar al Consejo y sus procedimientos especiales con fines ajenos a la cuestión de los derechos humanos. En tal sentido, compartimos algunos de los elementos mencionados por Yemen, en nombre de un grupo de países, y por otras delegaciones en cuanto a la necesidad de fomentar la cooperación y el diálogo en las labores del Consejo.

Es inaceptable que se visibilice selectivamente la situación de países en desarrollo; varios de ellos bajo medidas coercitivas unilaterales que tienen un grave impacto sobre los derechos humanos, mientras se guarda silencio cómplice ante los atropellos que cometen países ricos.

Igualmente, se utiliza a los procedimientos especiales contra países específicos. Reiteramos que los titulares de los procedimientos especiales deben observar el Código de Conducta adoptado durante el proceso de construcción institucional del Consejo de Derechos Humanos, y trabajar sobre la base de información contrastada. Ello no ocurre en todos los casos.

La cuestión de los derechos humanos no debe empañarse. Al abordar esta cuestión, deben prevalecer los principios de universalidad, objetividad y no discriminación. Por eso es tan relevante el Examen Periódico Universal, único mecanismo que permite el análisis integral de la situación de derechos humanos en todos los países y en pie de igualdad.

Sin dudas, el Consejo de Derechos Humanos pudiera cumplir mejor su rol, lo cual incluye evitar los dobles raseros. El fortalecimiento del Consejo, sobre la base de su mandato y como órgano subsidiario de la Asamblea General, es un objetivo que compartimos, y que debe perseguirse en estricto cumplimiento del llamado “Paquete de Construcción Institucional”.

Mucho más pudiera hacer el Consejo en materia de derechos, cuya existencia paradójicamente niegan los que pretenden dar lecciones a otros en la materia. El aporte del Consejo será esencial para hacer avanzar los derechos al desarrollo, a la paz, a un medioambiente sano y a la solidaridad internacional.

El Consejo también podría aportar más en la promoción de un orden internacional democrático y equitativo. Mientras persista el injusto orden actual, prevalecerán los intereses hegemónicos, el subdesarrollo y la exclusión de los países más pobres. La pandemia de la COVID-19 lo ha demostrado con claridad.

Señor presidente,

Como miembro activo del Consejo, mi país continuará trabajando para impulsar la cooperación, el diálogo y el respeto mutuo al abordar la cuestión de los derechos humanos. Continuaremos oponiéndonos a la manipulación, la selectividad y los dobles raseros.

Igualmente, continuaremos avanzando en nuestros esfuerzos para elevar cada vez más nuestros resultados en materia de promoción y protección de todos los derechos humanos para todas las personas.

Lo haremos a pesar del colosal impacto sobre esos mismos derechos que tiene el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos durante más de 6 décadas, y que se ha recrudecido de manera oportunista en medio de la pandemia de la COVID-19 hasta niveles sin precedentes.

Tampoco podrá doblegarnos la feroz campaña internacional que se dirige y financia desde los Estados Unidos contra mi país, para distorsionar nuestra realidad, generar inestabilidad, subvertir el orden constitucional escogido libremente por nuestro pueblo y justificar la política de agresión contra Cuba.

Muchas gracias.