Abr
20
2020
Girón, como una lección constante
La invasión mercenaria de abril de 1961 fue un fracaso. Se acabó, en efecto, en menos de 72 horas, aunque cobró la vida de valiosos hijos de la Patria, combatientes y civiles.
Hoy se sabe que desde el punto de vista estratégico la idea de la operación no fue un desacierto. El error fue de cálculo, y echó por tierra sus aspiraciones: subestimaron el espíritu patriótico y la dignidad de los cubanos.