En la década de 1970, Yugoslavia, Cuba y Angola se vincularon por un inusual intercambio de tecnología de construcción prefabricada. Como miembros del Movimiento de los Países No Alineados, estos tres países buscaron su propio camino de desarrollo más allá de la polarización de la Guerra Fría, en la que el sistema IMS-Žeželj desempeñó una función constructiva. Era una sofisticada estructura esquelética hecha de pilares de hormigón y paneles de techo, conectados por cables de acero, patentado en 1957 por el ingeniero Branko Žeželj en el Instituto IMS de Belgrado.
En los registros de la historia la construcción prefabricada ha surgido como una tecnología claramente colonial. Entre los primeros ejemplos figuran casas coloniales portátiles enviadas desde Inglaterra a Australia, edificios de hierro prefabricados que fueron exportados a California durante la fiebre del oro, así como operaciones comerciales que se transportaron a África Occidental. La tecnología prefabricada facilitó así la expansión imperial mediante asentamientos rápidamente poblados de territorios remotos bajo control europeo. El Palacio de Cristal, construido para la Exposición Mundial en Londres en 1851, representó la cima del inicio de la construcción industrializada y sus componentes estandarizados podrían acordar un número infinito de configuraciones.
El intercambio de tecnología IMS-Žeželj entre Yugoslavia, Cuba y Angola reorganizó esta "geometría del poder" colonial. En lugar de seguir los habituales flujos de ida de los centros imperiales a la periferia, tal intercambio creó un triángulo múltiple de solidaridad tecnológica a través del cual la tecnología se adaptó a las condiciones y necesidades locales, convirtiéndose en un producto común. Así, la tecnología de origen colonial se transforma en un medio de desarrollo poscolonial.
Durante 2023 y 2024, el equipo de investigación visitó Cuba y Angola para documentar los edificios creados por el intercambio tecnológico descrito y hablar con sus participantes. A través de fotografías, material de archivo y videos con arquitectos e ingenieros de los tres países, esta exposición explora cómo la "solidaridad triangular" ha creado conexiones duraderas entre continentes. Aunque la ambiciosa visión del orden mundial alternativo acabó desvaneciéndose en la década de 1990, los edificios de hormigón permitieron seguir sobreviviendo. Miles de familias siguen viviendo hoy en ellas, lo que es un testimonio del momento en que el intercambio tecnológico sirvió para la liberación y no la dominación.
El equipo de investigación y curaduría desea expresar su sincero agradecimiento a todos aquellos que contribuyeron a la exitosa realización de la investigación de campo, así como de la exposición y el catálogo que la acompaña. El proyecto ha recibido generoso apoyo de las siguientes fuentes:
Centro de Estudios Latinoamericanos, Caribeños y Latinx, Universidad de Vanderbilt; Comité de Apoyo a Becas de la Facultad (CSFS), Departamento de Historia del Arte, Grinnell College; Centro Kurb para las Artes, el Emprendimiento y las Políticas Públicas, Universidad de Vanderbilt; Beca de la facultad "David Lingle" en Arquitectura, Departamento de Arquitectura, Universidad Estatal de Iowa; Departamento de Arte e Historia de la Arquitectura, Universidad de Vanderbilt; Facultad de Artes y Ciencias de la Universidad de Vanderbilt; Fondo de viajes de compromiso global de la Universidad de Vanderbilt; Ministerio de Cultura de la República de Serbia; Embajada de la República de Serbia en Angola; Embajada de la República de Cuba; Embajada de la República de Angola; Instituto IMS Žeželj; Cinemateca Yugoslava.
Equipo curador-autor: Vladimir Kulić, Vesna Pavlović, Jelica Jovanović, Fredo Rivera, Ana Knežević, Emilia Epštajn
Diseño y diseño gráfico: Antun Sevšek y Damir Gamulin
Realización técnica: Ivan Vukdragović
La inauguración tendrá lugar en el Museo de Arte Africano. Viernes 16 de mayo a 18 h.
La exposición estará expuesta en el MAU hasta septiembre de 2025.
(EmbaCubaSerbia)