«El gobierno de EE. UU. mantiene en su "Lista de Alojamientos Prohibidos en Cuba" 422 hoteles y casas de renta privadas, aunque afirma apoyar a los emprendedores cubanos», escribió en su perfil de Twitter el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y ministro de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla.
Puntualizó además que, contrario al discurso, mantienen suspensión de cruceros, vuelos y el contacto pueblo a pueblo, en clara referencia a las 243 medidas coercitivas tomadas por la administración del presidente Donald Trump y que el actual inquilino de la Casa Blanca, Joe Biden, no ha variado.
El 5 de junio de 2019 entró en vigor la sanción estadounidense que impide los viajes de barcos de pasajeros, buques recreativos y aeronaves privadas desde Estados Unidos a Cuba, con lo cual fueron especialmente afectados los trabajadores por cuenta propia beneficiados con la actividad turística. Tal es el caso de quienes se dedican a la renta de habitaciones, administran cafeterías y restaurantes, alquilan u ofrecen paseos en autos clásicos, o venden artesanías, entre otros.
Ese mismo día también, según consta en un comunicado del departamento del Tesoro de EE.UU., los estadounidenses ya no podrían realizar «viajes educativos grupales», una de las pocas categorías con las que los ciudadanos de ese país podían viajar legalmente a la isla caribeña.
Fuente: Diario Granma