Tegucigalpa, 9 sep.- Honduras hizo hoy realidad el sueño de proclamarse país libre de analfabetismo, un desafío que se propuso el gobierno de la presidenta Xiomara Castro con la colaboración de profesionales de Cuba.
En una ceremonia este martes en la norteña ciudad de San Pedro Sula, se dio a conocer la declaratoria de territorio libre de analfabetismo, alcanzada después que los 18 departamentos (regiones) de este país centroamericano salieron del oscurantismo.
Todos lograron reducir su índice de analfabetismo por debajo de cuatro por ciento, umbral establecido por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) para otorgar esa calificación.
Esta declaratoria fue posible gracias al Programa Nacional de Alfabetización José Manuel Flores Arguijo, impulsado por la administración de Castro con la exitosa metodología cubana Yo, sí puedo.
Trabajar por el derecho a la educación transforma vidas, las protege, las salva, nos libera y nos empodera, subrayó Romina Kasman, representante de la Unesco.
“Con este programa yo encontré que eso es realidad, a veces los discursos son etéreos, pero esto es realidad y me parece importante constatar que aquí en Honduras la educación se está transformando y está transformando vidas”, resaltó Kasman en su intervención.
La funcionaria consideró que este resultado exitoso de Honduras representa para la Unesco un hito histórico en el nivel mundial, porque todavía 739 millones de personas en el planeta no están alfabetizadas, recordó.
“Este esfuerzo debe ser mirado no solo en la región, sino también a escala global, como un ejemplo de hermandad y cooperación con la hermana República de Cuba, porque es justamente a partir de esa solidaridad que se transforman los destinos de los países”, enfatizó.
La representante de la ONU no ahorró elogios para la Secretaría de Educación y reconoció la labor de los facilitadores y maestros cubanos y hondureños, a quienes calificó de héroes del proceso, dignos de ser reconocidos por la sociedad.
“Los hitos históricos comienzan como sueños, pero cuando los sueños tienen un plan y tienen cooperación y apoyo se vuelven realidad”, remarcó.
A su turno, la ministra de Educación de Cuba, Naima Trujillo, ratificó que su país seguirá apostando por esos proyectos y se sumó a los esfuerzos de organismos internacionales que apuestan por la alfabetización.
“Todo hombre, al venir a la tierra, tiene derecho a que se le eduque y después, en pago, el deber de contribuir a la educación de los demás”, destacó Trujillo, parafraseando al prócer de la independencia cubana José Martí.
De Martí también aprendimos lo que significa para la verdadera libertad la cultura, expresó la ministra.
Valoró que cada vez que se abre un camino de este tipo, “estamos viendo a un ser humano más realizado, con mayores oportunidades para entender qué es lo que realmente vale en la vida”, acentuó.
“Cuba seguirá apostando por los esfuerzos que sean necesarios, como hasta ahora lo hemos hecho”, concluyó la titular de Educación de la mayor de las Antillas.
(Prensa Latina)