Estimado Sir Alan Duncan MP
Estoy escribiendo para solicitar su intervención en este importante asunto.
Una vez más la administración de EE.UU. recrudece su política de bloqueo en contra de Cuba. El pasado 2 de mayo de 2019 entró en vigor el Título III de la Ley Helms-Burton, luego de estar suspendido por 23 años.
El Título III especifica que los ciudadanos estadounidenses y compañías norteamericanas podrán presentar demandas legales en cortes de EE.UU. contra empresas cubanas o extranjeras que actualmente se benefician de propiedades nacionalizadas tras el triunfo de la Revolución en enero de 1959. En violación de las normas legales internacionales, otorga los mismos derechos a cubanos que no eran ciudadanos de EE.UU. en aquel momento. Es una ley única en EE.UU. exclusivamente para Cuba, prepotente, arrogante y amenazadora. En esta situación, la única forma en que los referidos casos pudieran recuperar dichas propiedades en Cuba seria mediante el uso de la fuerza e intervención militar, puesto que las leyes de EE.UU. no tienen vigencia en Cuba.
No obstante, el gobierno de Cuba ha reiterado en varias ocasiones que está dispuesto a iniciar un proceso de negociación con el gobierno de los EE.UU. en la búsqueda de un acuerdo para que puedan ser compensados los referidos reclamantes. Las bases de esta negociación consideraría los casos reconocidos por la comisión de reclamaciones extranjeras de los EE.UU. siempre y cuando se tome en cuenta la indemnización que tiene derecho el pueblo cubano por los daños materiales, emocionales y del estado de salud, incluyendo pérdidas de vidas ocasionadas por los años de agresión militar, terrorismo y sanciones económicas provocadas por el gobierno de los EE.UU. En un proceso como ese, Cuba estaría dispuesta a llegar con el gobierno de los EE.UU. a un acuerdo de compensaciones mutuas. Así los reafirmó reciente el director de Estados Unidos en el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) de Cuba, Carlos Fernández de Cossío
Las nacionalizaciones que realizó el gobierno revolucionario fueron hechas en conformidad con las leyes cubanas y en correspondencia con el derecho internacional. Fueron los EE.UU. quienes no aceptaron llevar a cabo negociaciones de compensación para sus nacionales por las propiedades que sus ciudadanos tenían en territorio cubano. A diferencia de países como España, Suiza, Francia, Canadá y Gran Bretaña, Cuba estableció negociaciones para efectuar las compensaciones, estableciendo plazos para su ejecución acordes a la práctica internacional en estos casos.
El carácter extraterritorial del Título III viola también las leyes internacionales y la soberanía de terceros países, incluyendo la de sus propios aliados. Varios países como China, Rusia, México, Canadá y la Unión Europea han hecho público su rechazo a estas recientes medidas de EE.UU. En el caso de la Unión Europea ya han propuesto demandar a EE.UU. ante la organización mundial del comercio en relación a este asunto.
Agradecemos la posición del gobierno británico en cuanto a impedir la aplicación del bloqueo de EE.UU. y el Título III de la Ley Helms-Burton en su territorio, así como la disposición de colaborar con Cuba en proyectos de interés mutuo.
EE.UU. continúa amenazando con sanciones y multas de la OFAC a sectores financieros internacionales para evitar cualquier tipo de transacción o inversiones extranjeras en Cuba. En estos momentos la cuenta de Cubanos en UK en el banco británico HSBC se encuentra bajo ‘revisión’. Pocos días después de que nuestra asociación hiciera una donación de £660 para los damnificados del tornado que azotó la Habana en enero de este año, recibimos una notificación de HSBC en la que textualmente afirman:
... “no pueden utilizar productos o servicios de HSBC para actividades que involucren a Irán, Sudán, Corea del Norte, Siria, las Regiones de Crimea / Sebastopol o Cuba.
Por lo tanto, solicitamos al gobierno británico hacer cumplir las regulaciones vigentes que prohíben la imposición extraterritorial del Bloqueo en el Reino Unido. Nos referimos específicamente al decreto No. 3171 aprobado en 1996, relacionado con la “Protección de los intereses comerciales” sobre la legislación extraterritorial de Estados Unidos de América. Dicha legislación otorga al gobierno británico a la facultad de penalizar a personas jurídicas y naturales que hacen uso de la legislación norteamericana en territorio británico, como medida de contrarrestar los efectos de la misma.
El bloqueo de EE.UU. es una política de guerra económica que continúa causando graves problemas a la sociedad y economía cubana. Cuba estima que los daños acumulados por el bloqueo norteamericano alcanzan la cifra de 933 mil 678 millones de dólares en un periodo casi seis décadas de aplicación, castigando a todos los ciudadanos cubanos, dentro y fuera de Cuba.
Cubanos en UK rechaza de manera contundente la nueva escalada de sanciones de administración Trump en contra de Cuba. Rechazamos todo intento de arrebatar al pueblo de Cuba lo que la Revolución nacionalizó para beneficio de todos y que hoy le pertenece al pueblo cubano.
Esperamos su respuesta.
Gracias por adelantado.
Daniesky Acosta
Dir de Cubanos en UK
www.cubanos.org.uk