Tegucigalpa, 26 de junio de 2025.- Por invitación de la Secretaría de las Culturas, las Artes y los Patrimonios de los Pueblos de Honduras y del reconocido Grupo Político- Cultural "Coquimbo", la Embajada de Cuba participó, este jueves, en la inauguración del IX Encuentro Centroamericano de Artistas y Escritores Morazanistas "Relámpago que Siembra", que se desarrolla del 26 al 29 de junio en la ciudad de Tegucigalpa.
El evento, que reúne a intelectuales y artistas de nuestra América, constituye un espacio de convergencia cultural y literaria de alto valor simbólico, concebido para fortalecer la unidad e independencia de los pueblos centroamericanos, inspirados en los ideales emancipadores y unionistas del General Francisco Morazán.
Durante el encuentro, el Segundo Secretario de la Embajada, Yuniel Flores Aguiar, trasladó un fraternal y comprometido saludo de la Casa de las Américas a los participantes, deseándoles éxitos en este importante evento cultural y reafirmándoles el acompañamiento de Cuba "con el pueblo hondureño, con la América soñada por Morazán y Martí y con los escritores y artistas que luchan por el destino soberano, justo y digno de sus pueblos".
A continuación referimos el texto íntegro del saludo:
Saludo de la Casa de las Américas al IV Encuentro Centroamericano de Artistas y Escritores Morazanistas
"En el año 1966 la Casa de las Américas publicó, como parte de su colección Nuestros Países, un monográfico sobre Honduras preparado por el investigador y crítico Longino Becerra. Ya desde 1961, apenas un año después de fundarse su editorial y entregarse por primera vez su Premio Literario, los escritores y las escritoras de la patria de Francisco Morazán se incorporaban al catálogo de la institución.
Si bien este encuentro tiene como sede a Tegucigalpa, lo animan el espíritu morazanista, su lucha por la emancipación de los pueblos centroamericanos y la unidad de nuestra América toda. Es por ello que desde La Habana nos sentimos parte de él y transmitimos un saludo comprometido a los participantes.
En Centroamérica encontraron un hogar, y el escenario para organizar sus futuras batallas, muchos de los independentistas y revolucionarios cubanos de los siglos XIX y XX. Del mismo modo, Cuba fue otra patria para escritores y artistas como el guatemalteco Manuel Galich y el salvadoreño Roque Dalton. El arte revolucionario y comprometido que, como dijera nuestra fundadora Haydee Santamaría, es siempre el buen arte, no entiende de fronteras artificiales.
Es necesario y alentador encontrarnos en estos momentos, cuando el ascenso de las ultraderechas y los esfuerzos hegemónicos de las grandes potencias se dirigen contra las voces disonantes, y tratan de borrar nuestra capacidad para hablar con las palabras propias que tenemos.
Mario Benedetti, otro integrante de la familia de la Casa de las Américas, escribió en su prólogo a Poesía trunca, en 1977: «Esta antología no intenta, por supuesto, privilegiar el sacrificio de estos poetas con respecto al de otros revolucionarios; simplemente, quiere significar que, salvo deshonrosas excepciones, los poetas (y escritores y artistas en general) de América Latina, participaron y participan del destino de sus pueblos».
Con el pueblo hondureño, con Centroamérica, con la América soñada por Morazán y Martí, y con los escritores y artistas que luchan por el destino soberano, justo y digno de sus pueblos, están la Casa de las Américas y Cuba".
(EmbaCuba Honduras)