Praia, 11 de enero de 2021 Un fatídico 11 de enero de 1980 dejó de respirar la flor de la Revolución: Celia Sánchez Manduley, pero su firme ejemplo nos siguió acompañando en cada batalla que ha librado nuestro pueblo. A ti Celia, te recordamos con ese amor maternal hacia los hijos que tuviste a lo largo y ancho de tu amada Cuba; con tu fe inamovible en la victoria desde tu incorporación inmediata al Ejército Rebelde y con tu entrega sin límites hasta el último suspiro. Luz y batalla. MUJER imprescindible.
Celia fue clave en la Revolución cubana y considerada una heroína que luego continuaría desempeñándose como secretaria de la presidencia del Consejo de Ministros y en el Departamento de Servicios del Consejo de Estado. Sánchez se unió a la lucha contra el gobierno de Batista luego del golpe de Estado del 10 de marzo de 1952. Fue la fundadora del Movimiento 26 de Julio en Manzanillo . Al principio comenzó como corredora de armas, pero luego comenzó a trabajar como combatiente en la Revolución Cubana. Fue considerada la 'primera guerrilla femenina de la Sierra Maestra ya que fue la primera mujer de la revolución en disparar un arma. Con su arduo trabajo dentro del movimiento, se convirtió en la primera mujer en unirse a la guerrilla y eventualmente se convirtió en parte del estado mayor del ejército rebelde. Sánchez organizó y planificó el desembarco del Granma además de suministrar refuerzos al ejército. Sánchez trabajó junto a Frank Pais y Haydee Santamaria . Junto con Frank País , fue una de las primeras mujeres en formar un escuadrón de combate durante la revolución. Hizo los arreglos necesarios en toda la región de la costa suroeste de Cuba para el desembarco de Granma , y fue responsable de organizar refuerzos una vez que desembarcaron los revolucionarios. En 1957, se convirtió en la primera mujer en unirse a la guerrilla y se desempeñó como mensajera. Celia colocó pequeños telegramas dentro de una flor de mariposa., por lo que los mensajes permanecerían en secreto. Como miembro del estado mayor general del Ejército Rebelde, suministró al Che Guevara y a otros rebeldes armas, ocasionalmente alimentos y suministros médicos.
Tras la muerte de Celia Sánchez, el Comandante en Jefe Fidel Castro conmemoró su vida proclamando su simbolismo a la Revolución mediante un discurso frente al Hospital de Celia Sánchez Manduley dedicado a Celia Sánchez.
"Realmente creo que esta es la mejor forma de homenaje a quien se dedicó al deber, sin descansar un momento, sin olvidar un solo detalle; y creo, sinceramente, que este es el homenaje más sentido, profundo y revolucionario que se le puede dar a una compatriota que dio su vida por la Revolución".