Addis Abeba, 15 de junio de 2024 (ENA)- El embajador saliente de Cuba en Etiopía, Jorge Lefebre Nicolás, ha subrayado la necesidad de una cooperación más profunda entre las dos naciones para abordar los obstáculos y aspiraciones que comparten.
En una amplia entrevista que tuvo con ENA, el embajador reflexionó sobre el vínculo inquebrantable forjado entre Cuba y Etiopía cuando los soldados cubanos lucharon junto a las fuerzas etíopes para preservar la integridad territorial del país contra la ocupación extranjera hace casi medio siglo.
Esta amistad, cimentada en sangre con 163 vidas cubanas perdidas en suelo etíope, ha florecido hasta convertirse en una asociación multifacética a lo largo de décadas, dijo.
Mientras Etiopía y Cuba se preparan para conmemorar el 50 aniversario de sus relaciones diplomáticas en 2025, el Embajador Nicolás enfatizó la importancia de aprovechar esta relación para enfrentar los desafíos modernos.
Las áreas clave identificadas para una posible colaboración incluyen agricultura, atención médica, educación, gestión de recursos hídricos y biotecnología.
Afirmó que la agricultura representa una vía prometedora, ya que Cuba ofrece sus cuatro siglos de experiencia en la industria azucarera para impulsar la floreciente producción de azúcar de Etiopía.
Recíprocamente, Etiopía, como importante productor de café, podría ayudar a Cuba a aumentar sus rendimientos y variedades de café.
En materia de atención médica, el enfoque en Etiopía ha pasado de abordar la escasez de médicos a mejorar la especialización.
En este sentido, los expertos cubanos pueden capacitar a profesionales médicos etíopes en campos especializados, mientras las dos naciones exploran la investigación y el desarrollo biofarmacéuticos conjuntos, aprovechando el éxito de Cuba en el desarrollo de sus propias vacunas contra la COVID-19.
El embajador Nicolás también destacó la experiencia insular de Cuba en sistemas de transferencia de agua como valiosa para mejorar la productividad agrícola en Etiopía, una nación rica en agua.
Recordando los intercambios educativos y culturales, en los que históricamente más de 5.000 etíopes han estudiado en Cuba, pidió una fuerte cooperación Sur-Sur a través de bloques multilaterales como los BRICS, del cual Etiopía es el miembro más reciente, y el G77.
Con entendimiento mutuo, el embajador señaló que a medida que Etiopía y Cuba superen las presiones externas y los obstáculos internos, el vínculo de medio siglo entre los países podría forjar un modelo ejemplar de asociación Sur-Sur para un panorama global más equitativo.
Según él, las economías en desarrollo pueden reequilibrar las negociaciones comerciales y las instituciones financieras actualmente dominadas por las naciones ricas del Norte, si se unen.
El embajador Nicolás expresó optimismo en que las profundas conexiones entre pueblos, arraigadas en la indeleble herencia africana de Cuba, impulsarán las relaciones.
Si bien abrazan su identidad latinoamericana, los cubanos se ven a sí mismos como un "país africano alejado del continente" con el tejido cultural de la isla tejido con tradiciones africanas, explicó.
(Ethiopian News Agency)