Pese a la hostilidad de 60 años del gobierno de Estados Unidos, recrudecida hoy como nunca antes, con toda la crueldad de su bloqueo económico, comercial y financiero y de la activación de la Ley Helms-Burton, capaces de negarle a un infante la medicina que necesita para su cura, o intentar arrebatarle su escuela en virtud de ese cuerpo legislativo, absurdo e injerencista, Cuba es una garantía de futuro y de desarrollo para las niñas y los niños.
Nacer en la Mayor de las Antillas es venir al mundo en un país que está entre los primeros 35 del planeta con la mortalidad infantil más baja (5,0 por cada mil nacidos vivos), donde un sistema de vacunación lo protege contra 13 enfermedades y que, además, tiene eliminados 14 padecimientos infecciosos.
Las niñas y niños que nacen en Cuba tienen la garantía de que su nación es Estado Parte de la Convención sobre los Derechos del Niño desde 1991, documento no firmado por el imperio que los bloquea y agrede; viven en el país de América Latina y el Caribe con mayor índice en el desarrollo de la educación, con un 99,7 % de cobertura de atención a la primera infancia, con 31 aulas en hospitales pediátricos y, según datos de la Unesco, el único en la región que alcanzó los objetivos globales de la Educación para Todos en el periodo 2000-2015.
Es en este país en el que nada es más importante que una niña o un niño, por esa herencia martiana sobre la infancia y porque ha hecho realidad esa prédica del más universal de los cubanos, donde se celebrará la IV Conferencia Internacional sobre Protección a la Infancia (Proinfancia 2020), entre el 13 y el 15 de mayo próximo en el hotel Cubanacán Comodoro, de La Habana.
Cuba acoge la cita, por tercera vez, con la organización de la Dirección de Relaciones Internacionales del Ministerio del Interior y el auspicio de la oficina de Unicef en la Isla. Especialistas e investigadores intercambiarán y estrecharán vínculos de cooperación en la búsqueda de soluciones a los problemas concurrentes a la protección integral de la niñez y la adolescencia en sus respectivos países, así como promover una cultura de divulgación en estos temas.
Fuente: Periódico Granma.