“Fidel se sentiría orgulloso de ver este extraordinario centro educacional que honra su obra y su memoria. Los felicito por el esmero con que cuidan y preservan cada espacio de este palacio del conocimiento”, expresó Sergio Vigoa de la Uz, embajador de Cuba en Namibia, durante el acto por el aniversario 97 del natalicio del Comandante en Jefe, realizado en la escuela primaria “Fidel Castro Ruz”, ubicada en Katutura, un barrio vulnerable de Windhoek.
A 15 kilómetros de la capital de Namibia se levanta el poblado de Katutura, reconocido no solo por sus calles de terraplén, adornadas con una variedad de colores por las múltiples vendutas que ocupan todo el espacio. Se le conoce también porque los habitantes de este lugar escenificaron continuas protestas contra el régimen racista sudafricano del apartheid, en la cruenta época de colonialismo que sufrió esta tierra de hombres bravos.
La independencia definitiva de Namibia se logró gracias a la participación decisiva de las tropas cubanas, de conjunto con las angolanas y namibias, que obligó al gobierno de Sudáfrica a aceptar la definitiva liberación de Angola, librar a Sudáfrica del régimen del apartheid y conseguir que Namibia se convirtiera en nación.
Es así que las relaciones entre Namibia y Cuba se construyeron bajo una sólida base y han crecido con la colaboración cubana en varios sectores estratégicos para este país africano, especialmente en la formación de jóvenes namibios en la Isla caribeña.
Como parte de esa hermandad se nombra “Fidel Castro Ruz” a la escuela de Katutura, fundada en 2007, que cuenta con una matrícula de 1500 niños de primero a séptimo grados y con espacios muy bien cuidados donde funcionan aulas, salones de trabajo, comedor, áreas deportivas y un laboratorio de computación que estará listo próximamente y servirá para el aprendizaje de estudiantes y profesores, además de prestar servicio a la comunidad. En el centro se imparten clases de idioma inglés, lenguas afrikáans y oshindonga, enseñanza agrícola, medio ambiente, arte, educación física, religión y matemáticas.
El homenaje, al que asistió además Omar Berroteran Paredes, embajador de la República Bolivariana de Venezuela, fue organizado por la Embajada de Cuba, la Asociación “Patria” de cubanos residentes, colaboradores de misiones estatales y la Asociación de Amistad Namibia-Cuba.
La directora de la escuela, Ndapandula Martha Shilyomunhu, agradeció el apoyo de la embajada cubana al centro educativo y expresó el orgullo y compromiso que representa para sus maestros y alumnos el hecho de llevar el nombre del querido Comandante.
El emotivo encuentro contó con las actuaciones de grupos danzarios de la escuela y de un coro de voces compuesto por profesores que cantaron temas dedicados a Fidel. Al cierre del acto los niños disfrutaron de un festival deportivo-recreativo y un grupo considerable recibió la atención de médicos cubanos que realizaron consultas a alumnos y profesores.
El embajador donó al centro un cuadro con imágenes del líder de la Revolución cubana y de San Nujoma, padre fundador de Namibia. “Este homenaje quedará grabado en todos nosotros como un acto de amor por el futuro del hermano pueblo de Namibia, encarnado en ustedes. La perseverancia del Comandante, su confianza en el hombre y su entrega a la causa de la Revolución, han dejado una huella imborrable en los cubanos y han servido de inspiración a millones de hombres y mujeres de todos los continentes. Para los niños y profesores de esta escuela es también ese legado”, concluyó el diplomático cubano.