(Transcripción de la entrevista concedida por el embajador cubano, Sergio Vigoa de la Uz, al programa Good Morning Namibia de la cadena de televisión NBC)
- Por el bien de nuestros espectadores que miran esta mañana, denos una breve historia del embargo impuesto a Cuba por Estados Unidos y por qué la situación se ha prolongado tanto tiempo.
El bloqueo económico, comercial y financiero ha definido la política de los Estados Unidos hacia Cuba por más de seis décadas. Se trata de una guerra contra la economía, la sociedad, la vida cotidiana y los sueños de los cubanos. Más del 80% de nuestra población solo ha conocido una Cuba con bloqueo.
La fecha de inicio del bloqueo de EEUU vs Cuba se remonta a octubre de 1960 cuando el subsecretario de Estado Lester Mallory escribió un infame memorando, el 6 de abril de ese año, que constituye la génesis y esencia del bloqueo, cuyo texto dice:
“La mayoría de los cubanos apoyan a Castro… el único modo previsible de restarle apoyo interno es mediante el desencanto y la insatisfacción que surjan del malestar económico y las dificultades materiales… hay que emplear rápidamente todos los medios posibles para debilitar la vida económica de Cuba… una línea de acción que, siendo lo más habilidosa y discreta posible, logre los mayores avances en la privación a Cuba de dinero y suministros, para reducirle sus recursos financieros y los salarios reales, provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del Gobierno”.
Este texto es una joya de la política internacional y de la política de Estados Unidos contra Cuba.
El 3 de enero de 1961, el entonces Presidente estadounidense Eisenhower, rompió relaciones diplomáticas con Cuba. El 7 de febrero de 1962, el presidente de Estados Unidos, John F. Kennedy, declaró el bloqueo unilateral de ese país contra Cuba y firmó la orden presidencial para implantar un bloqueo total contra la Isla, cuyo objetivo era cortar todo tipo de vínculo comercial con Cuba.
En 1992 el bloqueo adquirió carácter de ley y en lo adelante las relaciones se tornaron cada vez más hostiles, pasando por todas las administraciones hasta el período marcado por la aplicación continua y deliberada de las medidas de máxima presión instauradas durante el gobierno de Donald Trump y la inercia e inmovilismo del actual gobierno del presidente Joseph Biden.
El bloqueo de EEUU hacia Cuba es el más prolongado que se conoce en la historia moderna, a pesar del extraordinario apoyo que la comunidad internacional ha mostrado y de la afectación que representa, no solo para Cuba, sino para el resto de los países del mundo que desean comerciar con nuestro país.
- ¿Cómo ha respondido la comunidad internacional a la Resolución 77-7, en particular los países involucrados en la Asamblea General de las Naciones Unidas durante los últimos 60 años?
Cuba ha presentado en la Asamblea General de Naciones Unidas, por 30 ocasiones consecutivas, la Resolución contra el bloqueo. En todas la votación ha sido abrumadora. Solo Estados Unidos, Israel y algún otro país títere de la política yanqui, han votado en contra. Namibia ha sido unos de los países que ha votado siempre a favor de esa resolución, como muestra de su política solidaria al lado de la revolución cubana.
La comunidad internacional ha rechazado y condenado también la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo, argumento que ha usado EEUU para imponer mayores medidas restrictivas en contra del pueblo cubano, contrarias a la carta de las Naciones Unidas y al mandato del Consejo de Seguridad.
- En su opinión, ¿qué impacto cree que tendrá la Resolución 77-7 en las relaciones entre Estados Unidos y Cuba y en las relaciones internacionales más amplias en la región una vez que se vote e implemente con éxito?
El Gobierno de los Estados Unidos ha ignorado por 30 años las sucesivas resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas y las voces a lo interno de la sociedad estadounidense que aboga por poner fin al bloqueo. Recordemos que las resoluciones que se aprueban en la Asamblea General de Naciones Unidas, que además es el órgano más representativo, no son vinculantes, es decir que no son de obligatorio cumplimiento. Es una política anacrónica que ha terminado por desacreditarlos y aislarlos.
En la esfera internacional, a pesar de las medidas de terrorismo económico, Cuba continúa renovando su vocación humanista, y su espíritu de cooperación y solidaridad con todos los pueblos del mundo.
Los líderes mundiales, en consonancia con lo discutido en La Habana durante la cumbre del Grupo de los 77 más China, insisten en el respeto de los principios del derecho internacional para la construcción de un mundo más justo y equitativo.
- ¿Cómo podría el levantamiento del bloqueo, tal como lo propugna la Resolución 77-7, mejorar las condiciones de vida y las perspectivas económicas de la población cubana?
Ninguna familia cubana escapa de los efectos del bloqueo de los Estados Unidos. La Resolución que se votará mañana llama al levantamiento de las medidas coercitivas unilaterales, cuyos daños económicos estimados ascienden a más de un billón de dólares.
El bloqueo provoca daño humanitario, sufrimientos, privaciones, angustia. A Cuba se le niega el derecho de adquirir tecnologías, materias primas, reactivos, medios diagnósticos, medicamentos, dispositivos, equipos y piezas de repuesto necesarios para el mejor funcionamiento de su Sistema Nacional de Salud, los que tiene que obtenerse en mercados geográficamente lejanos o a través de un tercer país, con un incremento en los costos.
Durante la pandemia de la COVID-19, el bloqueo prohibió las importaciones a Cuba de ventiladores pulmonares y de oxígeno desde terceros países, y se tomaron medidas contra el escalado industrial de la producción de nuestras vacunas.
Las sanciones contra Cuba han provocado que el pueblo sufra el deterioro de la producción y los servicios en el país, las escaseces de alimentos, combustibles, medicinas y piezas de repuesto, la dificultad para acceder a tecnologías de punta, la disminución de los servicios a la población, las afectaciones monetarias y financieras.
Todo este panorama fuera distinto con el levantamiento del bloqueo.
- Háblenos sobre esfuerzos anteriores que ha hecho el gobierno cubano con respecto al bloqueo, y ¿qué tan receptivo ha sido Estados Unidos ante estos esfuerzos?
Cuba ha presentado pruebas en todos los foros internacionales, a lo largo de más de 60 años, de las atroces consecuencias de la política del gobierno norteamericano hacia nuestro país.
Las distintas administraciones norteamericanas, haciendo caso omiso a los reclamos mundiales, lejos de terminar con su demencial política, han recrudecido de manera enfermiza las medidas extraterritoriales.
Cuba y Estados Unidos son firmantes de los convenios suscritos en Ginebra en el año 1949, regulatorios del Derecho Internacional y el Derecho Internacional Humanitario, que obligan a los estados adscriptos a adoptar las medidas necesarias para la protección de los civiles.
Sin embargo, la potencia mundial trata de rendir por hambre y enfermedades a todo un pueblo, sembrar el descontento en la población y minar el apoyo al proceso revolucionario.
Quiero aclarar que el bloqueo es una medida unilateral del gobierno de los Estados Unidos contra Cuba, no es Cuba quien bloquea a Estados Unidos, por tanto, es el gobierno norteamericano quien debe hacer esfuerzos y mostrar interés por eliminar definitivamente esa medida.
- ¿Ha tenido el embargo a Cuba algún impacto en las relaciones bilaterales de Cuba con otros países con los que Cuba comercia?
El bloqueo contra Cuba tiene la característica de que incluye la persecución de quienes intentan evadirlo en cualquier terreno. Esta política tiene carácter extraterritorial y lesiona la soberanía de otras naciones.
Las sanciones estadounidenses afectan no solo a los ciudadanos cubanos, sino también a entidades de terceros países que buscan hacer negocios con Cuba.
En marzo de 1962 el Departamento del Tesoro estableció la prohibición de entrada a territorio norteamericano de cualquier producto elaborado total o parcialmente con materia prima o producciones cubanas, aunque vinieran de un tercer país, esto significa que, si solo tiene un 10% de componente de materia prima cubana, no puede entrar a Estados Unidos.
Ley para la Democracia Cubana o Ley Torricelli de1992 prohíbe a las subsidiarias de compañías estadounidenses en terceros países, comerciar bienes con Cuba o nacionales cubanos. Prohíbe también a los barcos de terceros países que toquen puerto cubano, entrar a territorio estadounidense en un plazo de 180 días, excepto aquellos que tengan licencia del Secretario del Tesoro.
Al amparo del Título III de la Ley Helms-Burton, existe la posibilidad de tomar acción judicial en tribunales estadounidenses contra entidades que “trafiquen” con propiedades nacionalizadas en Cuba en la década de 1960.
- ¿Cuál esperan el gobierno y el pueblo cubanos que sea el resultado de la próxima votación y debate sobre la resolución?
Como en las últimas tres décadas, la comunidad internacional ratificará su apoyo a la Resolución y el rechazo a esta injusta e ilegal política que tiene como propósito declarado estrangular la economía del país para provocar un cambio de régimen.