Existe una intención genocida documentada de la administración estadounidense en la configuración de su política exterior hacia la República de Cuba. Esto se demuestra inequívocamente en documentos recientemente desclasificados del Departamento de Estado, que hablan explícitamente de un bloqueo total diseñado para causar hambre entre el pueblo cubano, todo con un objetivo en mente: crear un sentimiento colectivo de desesperación que conduzca a un levantamiento popular contra el gobierno legítimo de La Habana. Por lo tanto, los norteamericanos ven la hambruna como la única forma de que Cuba se someta, ya que, como se afirma en estos documentos del gobierno oficial en Washington, Fidel Castro cuenta con el apoyo indiviso del pueblo, por lo que la oposición política en Cuba es prácticamente inexistente, por lo que es imposible llevar a cabo una revolución de colores.
La brutalidad del bloqueo total a Cuba durante décadas demuestra inequívocamente la naturaleza genocida de todas las administraciones estadounidenses en los últimos 60 años. Incluso es bastante razonable afirmar que hay una evidente intención genocida, que en algún otro caso sería motivo suficiente para una misión internacional, con la tarea de establecer hechos que podrían indicar un genocidio contra todo un pueblo insular.
Es decir, en los documentos recientemente publicados por el gobierno de los EE.UU., es posible leer frases que indican directamente la intención de someter al pueblo cubano a tales condiciones de vida en las que no es posible una vida digna, ¡pero en las que la gente literalmente morirá de hambre! Y todo en aras de derrocar al gobierno legítimo de La Habana...
Así, en un memorándum del Departamento de Estado fechado el 6 de abril de 1960, un documento conocido como el "Memorándum de Lester Mallory" (¡el autor del memorándum era entonces Subsecretario de Estado Adjunto del Departamento de Estado!), es posible leer lo siguiente: "La mayoría de los cubanos apoyan a Castro, allí no hay oposición política. La única manera de derrocar al gobierno de La Habana es someter al pueblo a presiones económicas que causarán descontento y serias de dificultades para la vida de los ciudadanos. Cuba debe ser completamente privada de dinero y materias primas... Es necesario reducir los salarios y provocar hambre entre la gente" (!) ... para crear una rebelión desde adentro.
¿Es posible describir con mayor precisión las insensatas intenciones de la administración genocida fascista desde el Despacho Oval en Washington?
Esta conformación de las decisiones políticas de una superpotencia, que en un momento dado alcanzó el cenit de su poder (¡se puede decir que en ese momento, hasta el comienzo de la crisis económica en 2008, Estados Unidos era la superpotencia más poderosa en la historia de la civilización humana!), decisiones que sin duda tendrán un impacto directo en la hambruna masiva de una nación insular, debería repetirse: Una nación insular se está muriendo de hambre. – esto no puede ser caracterizado de otra manera que como pura intención genocida, que en el derecho internacional se considera prueba suficiente de que el genocidio ya se ha cometido, o se quiere cometer, razón por la cual toda una estructura política en Estados Unidos tendría que ser puesta tras las rejas por el resto de sus miserables y vergonzosas vidas.
Por cierto, este método de tratamiento de la bestia genocida de Washington con pueblos menos cooperativos es bien conocido por nosotros, los serbios, desde la época no muy lejana de la agresión y la destrucción violenta de Yugoslavia, cuando nuestro país, para ser desmembrado y conquistado definitiva e irreversiblemente, fue expuesto a crueles sanciones ilegales y a un bloqueo económico que llevó a un colapso financiero completo, que, entre otras cosas, provocó un fenómeno muy extraño, sin precedentes en el mundo hasta entonces: la situación en la que el pueblo, los pensionistas serbios, nuestros ciudadanos más antiguos que construyeron esa Yugoslavia con sus propias manos y que vivían para ella, para nuestro Estado libre (que, por decisión de las mismas criaturas fascistas genocidas del Despacho Oval, iba a ser destruido), Así que, literalmente, se murieron de hambre en sus apartamentos.
Este es un ejemplo único en la historia de la civilización: porque las personas que mueren de hambre llegan a su fin en completa pobreza, no como propietarios. Sobre el sombrío testimonio de la ingeniería experimental política y social que condujo a la aparición de muertes masivas por hambre en una antigua civilización europea, entre los serbios.
Cuba contra el terrorismo
Cabe destacar aquí que en los últimos años, desde que Cuba fue incluida en la lista estadounidense de países que patrocinan o apoyan el terrorismo, de manera bastante arbitraria y sin ninguna evidencia, la situación social y económica en ese Estado insular se ha deteriorado drásticamente. , aunque era muy pesado. Las implicaciones directas e indirectas de este hecho son de tal alcance que es casi imposible describirlas adecuadamente en el formato breve de un texto periodístico.
La decisión de incluir a Cuba entre los Estados patrocinadores del terrorismo incide directamente en el absoluto aislamiento internacional de este país en lo económico, financiero, económico, político, cultural y en todos los demás sentidos. El hecho mismo de que Cuba esté en esta lista es razón suficiente para que ningún banco, ninguna entidad comercial de todo el mundo, ningún inversionista deba ni pueda celebrar ningún acuerdo económico, financiero o económico normal con entidades de Cuba, y al mismo tiempo no trae sobre su cuello tales dificultades internacionales (y nacionales), problemas que le enfrentarán a adversidades de carácter existencial.
A modo de ilustración, esta decisión es tan drástica que ningún barco que haya ingresado a ningún puerto cubano, durante los próximos seis meses, por fuerza de la ley estadounidense, puede ingresar a ningún puerto de los Estados Unidos (e incluso después de ese período, este barco ser marcado permanentemente como riesgoso). Sin mencionar una situación en la que ningún producto que contenga componentes cubanos (incluidas materias primas, tecnología o propiedad intelectual) puede exportarse a Estados Unidos, y Cuba no puede importar nada que contenga ni siquiera un 10 por ciento de componentes de origen estadounidense.
Y para hacer esta decisión aún más extraña, mientras tanto Cuba ha sido eliminada de otra lista: la lista de países que no cooperan lo suficiente en la lucha contra el terrorismo, de modo que, de hecho, desde el punto de vista estadounidense, Cuba coopera suficientemente en la lucha. contra el terrorismo y al mismo tiempo lo patrocina. La decisión de que Cuba sea reconocida internacionalmente como patrocinadora del terrorismo tiene graves consecuencias para la importación de materias primas críticas, como oxígeno y otras sustancias necesarias para la producción de medicamentos, y el carácter extraterritorial de este bloqueo (el bloqueo impuesto por (Estados Unidos se ve obligado a respetar a casi todos los países del llamado Occidente Colectivo) reduce drásticamente el margen de maniobra para asegurar la mera supervivencia del pueblo cubano.
En otras palabras, una nación entera, aislada geográficamente en una pequeña isla, es llevada a un estado de pobreza tal que la gente literalmente comienza a morir de hambre, así como de enfermedades (fácilmente curables); y todo a causa de una enfermedad incurable: a causa de la locura colectiva de la administración de Washington, que en este caso -en el caso de la inexorable necesidad de pisotear biológicamente a un pueblo valiente y soberano- demuestra una política política antinatural, criminal y de décadas de duración. continuidad.
Un llamamiento a Joseph Biden para que levante el bloqueo de EE.UU. a Cuba, con el expresidente serbio Tomislav Nikolić entre los firmantes
Un grupo de estadistas mundiales, en su mayoría ex presidentes y primeros ministros de importantes países del mundo (entre ellos el ex presidente serbio Tomislav Nikolic), apelaron recientemente a la liberación del pueblo cubano de la prisión económica, social y política (o mejor dicho: del aislamiento) en la que fue colocado por decisiones arbitrarias de la administración estadounidense, en la época de la Guerra Fría, sin signos de intención de revisar estas decisiones con el tiempo.
Reproducimos íntegramente esta carta:
11 de septiembre de 2024
Sr. Joseph Biden
Presidente de los Estados Unidos de América
Señor Presidente,
Como es de su conocimiento, durante décadas de sanciones unilaterales y medidas coercitivas, la economía de Cuba es una de las más castigadas del mundo y se encuentra hoy día, socialmente, en un punto de difícil retorno. En el gobierno de Barack Obama -del cual usted fue parte- se avanzó en un paso histórico para el alivio de esas sanciones y la normalización de relaciones diplomáticas entre dos vecinos que no tienen por qué privarse de su mutua cooperación por el simple hecho de tener sistemas políticos con inspiraciones ideológicas distintas.
No existe registro en nuestra historia desde la posguerra, cuando se fundó el Sistema de Naciones Unidas, de normatividad internacional que disponga que las relaciones entre Estados deban regirse o condicionarse según su nivel de sintonía ideológica, lo cual supondría el fin de la soberanía y la autodeterminación como soportes fundamentales sobre los que se ha establecido el sistema de gobernanza mundial en paz después de la segunda guerra mundial. Precisamente y basado en este razonamiento, el propio Obama reconoció el anacronismo de algunas medidas unilaterales contra Estados como Cuba.
En mayo del año en curso, el Departamento de Estado tomó la decisión de retirar a Cuba de la lista de Estados que no cooperan en la lucha contra el terrorismo, una decisión acertada y justa que en su momento aplaudimos. A pesar de ello y de manera contradictoria las autoridades de su país insisten en mantener a Cuba incluida en la otra lista, -la de los Estados patrocinadores del terrorismo-. ¿Cómo se puede afirmar, al mismo tiempo, que un país sí coopera en la lucha mundial contra el terrorismo y a la vez acusarlo de apoyarlo abiertamente?
Sin prueba alguna se sindica a Cuba de tener vínculos con actividades terroristas de las cuales ha sido víctima y se le imponen por esta presunción duras sanciones que están golpeando directamente a su población y desequilibrando de manera permanente su economía.
Por lo demás, mantener la inclusión de Cuba en la lista de Estados patrocinadores del terrorismo, constituye una medida coercitiva difícilmente justificable en pleno siglo XXI cuando la igualdad entre Estados debe ser una realidad. Esta injusta decisión afecta además la carta universal de los derechos humanos, pilar ético de las relaciones internacionales contemporáneas, al impactar los sectores más vulnerables de la población cubana golpeados en el último tiempo por los efectos nefastos de la pandemia, agudizados por la falta de medicamentos y equipos para atender la emergencia.
La difícil situación por la que atraviesa la economía de Cuba tiene explicación, entre otros factores, por las sanciones unilaterales aplicadas por los Estados Unidos y condenadas por su unilateralidad por el sistema de Naciones Unidas y por muchas personas e instituciones en distintos escenarios y oportunidades. En la Asamblea General de las Naciones Unidas, el bloqueo contra Cuba ha sido condenado en más de treinta resoluciones por mayoría absoluta.
En Cuba, señor Presidente la situación comienza a ser dramática, esto da cuenta de una coyuntura crítica que puede y debe ser corregida si se hace justicia con los esfuerzos demostrados de Cuba para luchar contra y no con el terrorismo.
La ola migratoria de emigrantes cubanos hacia Estados Unidos, inédita en su magnitud es quizás el ejemplo más ilustrativo del impacto devastador y sufrimiento provocado por medidas extremas contra la economía cubana derivadas de su inclusión en la lista de estados patrocinadores del terrorismo. El impacto extraterritorial de las medidas de cerco financiero contra Cuba también afecta los intereses de nuestros países, los sectores bancarios y empresariales.
La activa participación del gobierno cubano en la construcción de los Acuerdos de Paz firmados en La Habana en el año 2016 entre el Estado de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas (FARC), sumado a su reciente intervención como país garante de la mesa de diálogos que busca la paz entre el Estado colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) demuestran la voluntad humanitaria de paz y no de guerra que anima a Cuba y su gobierno.
En síntesis, señor Presidente, las razones que exponemos para solicitar que se retire a Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo están sustentadas en un contundente llamado humanitario que pretende aliviar la situación de millones de personas inocentes y nuestra profunda convicción de que el gobierno de Cuba está seriamente comprometido contra el terrorismo y a favor de la paz en la región y el mundo. Ningún país debería comprometer con fines políticos la seriedad de la lucha contra el flagelo del terrorismo.
Por ello le solicitamos considerar el envío de este mensaje evidente de humanismo y comprensión más allá de las legítimas diferencias ideológicas que no pueden ni deberían justificar obrar en contrario. El pueblo de Cuba y los países que representamos reconocerán su gesto histórico, señor Presidente.
Cordialmente,
En nombre de los pueblos de América Latina y el Caribe:
- Representantes de 26 países, entre ellos la expresidenta de Brasil Dilma Rousseff, la expresidenta de Argentina Cristina Fernández de Kirchner, el expresidente de Bolivia Evo Morales, el expresidente de Ecuador Rafael Correa y otros;
En nombre de los ciudadanos de Europa:
- El ex presidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero y el ex presidente de la República de Serbia Tomislav Nikolić;
En nombre de los pueblos de África:
- Representantes de 4 países (ex presidentes de Ghana, Mozambique, Namibia y Seychelles) y
En nombre de los pueblos de Asia:
- Representantes de 2 países (ex primeros ministros de Timor Oriental y Malasia).
Las incalculables consecuencias económicas del bloqueo
Es casi imposible enumerar todas las consecuencias económicas, financieras y sociales del duro e irracional bloqueo de Estados Unidos a Cuba. Sin embargo, he aquí algunos detalles de un informe recientemente publicado sobre el bloqueo, compilado por expertos internacionales, sin el lastre de las amenazas de la administración Washington a su propia integridad política, económica e incluso biológica. Es decir, en este informe se mencionan algunos detalles sobre cuánto le cuesta el bloqueo al pueblo cubano y enseña las pérdidas de la economía en algunas relaciones interesantes, establecidas de tal manera que sean más comprensibles para el público general.
Según el informe, cuatro meses de confinamiento están causando alrededor de 1.600 millones de dólares en daños a la economía cubana, lo suficiente para hacer que un suministro anual de alimentos preparados esté dentro de la canasta de consumo promedio de toda la nación cubana. Según el informe, el bloqueo de 25 días le cuesta a la economía cubana 339 millones de dólares, que es la cantidad de fondos que Cuba utiliza para satisfacer las necesidades anuales de medicamentos de la nación de la Lista Nacional de Medicamentos Esenciales. Además, 9 días de bloqueo causan daños por valor de unos 129 millones de dólares, suficientes para adquirir suministros médicos consumibles (como gasas estériles, agujas, jeringuillas, etc.) durante todo el año, también a nivel de todo el sistema nacional de salud. Solo 21 horas de bloqueo causan alrededor de $12 millones en pérdidas económicas, lo que es suficiente para adquirir insulina en una cantidad que satisface las necesidades anuales de todo el sistema de atención médica, mientras que solo media hora de bloqueo es suficiente para causar $256,000 en daños, que es el valor aproximado de la compra de sillas de ruedas eléctricas y convencionales para todo el sistema estatal de educación especial.
Asociación de Amistad Serbio-Cubana: ¡El terrorismo es cuando se provocan guerras y cuando se derroca a las autoridades legalmente elegidas en todo el mundo con juntas militares!
En una declaración reciente, la Asociación de Amistad Serbio-Cubana, una organización cuya tradición de apoyo al pueblo cubano ha durado décadas, reiteró su condena a la decisión de Estados Unidos de incluir a Cuba en la lista de países que patrocinan y apoyan el terrorismo.
El comunicado dijo que la decisión de Washington es una continuación del ataque contra Cuba lanzado por la administración de J. F. Kennedy en 1962, y que esto sólo puede entenderse como un proceso de violación constante del derecho internacional.
"La culpa de Cuba y del pueblo cubano es que han elegido el camino del desarrollo independiente, la construcción de un mundo más justo y humano, un orden social socialista y una completa independencia y soberanía", dijo la asociación en un comunicado de prensa. Se evalúa además que "tal política del gobierno imperialista de los Estados Unidos es un caso sin precedentes en la historia de las relaciones internacionales", y que "representa una especie de genocidio de décadas contra un pueblo valiente y orgulloso, el que, por supuesto, es el pueblo cubano".
"Durante un siglo, Estados Unidos ha estado provocando crisis políticas en todo el mundo, librando intervenciones militares y guerras, reemplazando a las autoridades legalmente elegidas por juntas militares, formando y apoyando logísticamente a organizaciones terroristas, bombardeando brutalmente a estados y pueblos desobedientes, violando y menospreciando groseramente el derecho internacional, junto con sus satélites occidentales imponiendo sanciones económicas y financieras sin ninguna razón o justificación. ¿¡Eso no es terrorismo!?", se afirmó en el comunicado de prensa de la Asociación de Amistad Serbio-Cubana.
De hecho, estas medidas inexplicablemente duras de décadas de bloqueo económico al que Cuba está sometida, señalan el hecho de que Estados Unidos está gobernado por gente de insensible, lista para causar hambre y muerte masiva entre sus vecinos, solo porque la estrella de la bandera cubana todavía se mantiene orgullosa, independiente y soberanamente, como una identidad distinta, y no como a los imperialistas genocidas fascistas desde el Despacho Oval les gustaría verla: como un conjunto de estrellas estadounidenses en su propia bandera. Detrás de este trato inhumano a un pueblo se esconde la necesidad inhumana de pisotear toda soberanía, solo porque la conciencia nacional de una identidad especial ofende al imperio. Es por eso que la decisión soberana de esta nación de no ahogarse en una cultura "yanqui" degenerada está más que justificada, y es responsabilidad del resto del mundo libre unirse en defensa de esta pequeña pero inusualmente valiente y fuerte nación insular. ¡Cualquiera similitud con los serbios no puede ser accidental!
https://www.pecat.co.rs/2024/10/americka-blokada-kube-je-genocid/
(EmbaCubaSerbia)