Ankara, 5 de octubre de 2020. La principal agencia de prensa de Turquía “Anadolu” publicó un artículo de opinión del embajador cubano, Luis A. Amorós Núñez, el cual difundió también a través de su cuenta en la red Twitter. Este trabajo, bajo el título ‘Mantiene Estados Unidos silencio cómplice frente atentado a Embajada cubana en Washington’, expresó lo siguiente:
“El pasado 22 de septiembre el presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez resaltó en el Debate General (virtual) del 75 Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas que no pasaba una semana sin que el gobierno de los Estados Unidos emitiera declaraciones contra Cuba o impusiera nuevas restricciones.
Sin embargo, llamó la atención que resultaba ‘paradójico que (este mismo gobierno) ha rehusado a calificar como terrorista el ataque perpetrado contra la Embajada de Cuba en Washington, el 30 de abril de 2020, cuando un individuo armado con un fusil de asalto disparó más de 30 cartuchos contra la sede diplomática y confesó después su intención de matar’.
Es una realidad que el terrorismo continúa siendo un gran desafío para el mundo. No puede erradicarse si prevalecen dobles raseros, manipulaciones y oportunismo político y selectividad para hacerle frente.
El comentado ametrallamiento de la sede diplomática cubana con intención de matar es resultado directo de la política agresiva del gobierno de los Estados Unidos contra Cuba y de la tolerancia e instigación a la violencia de políticos y grupos extremistas anticubanos.
Cuba no olvida la larga trayectoria de terrorismo contra sus diplomáticos. El servicio exterior cubano tiene 11 mártires, asesinados violentamente por grupos terroristas, uno de ellos en 1980 en una avenida céntrica en Queens, en la ciudad de Nueva York.
El gobierno de los Estados Unidos debe reconocer y denunciar el carácter terrorista de este ataque con más de 30 impactos de bala contra la Embajada cubana y compartir con Cuba toda la información sobre el mismo. Lo contrario equivale al silencio cómplice sospechoso a la tolerancia del terrorismo.
La actitud asumida contradice la propia retórica antiterroristadel gobierno de los Estados Unidos. Mientras incluyen a Cuba en una lista espuria de países que no cooperan plenamente con los esfuerzos antiterroristas de los Estados Unidos, no reconocen el carácter terrorista del ataque del 30 de abril contra nuestra Embajada. Ocultan su historia de Terrorismo de Estado contra Cuba y la impunidad de grupos violentos en su territorio.
En cambio, existen evidencias concretas de la colaboración bilateral de Cuba con Estados Unidos en el combate contra el terrorismo y los esfuerzos conjuntos de aplicación y cumplimiento de la ley.
Cuba ha expresado reiteradamente su más profundo rechazo y condena a todos los actos, métodos y prácticas terroristas en todas sus formas y manifestaciones, por quien quiera, y donde quiera que se cometan, sean cuales fueren sus motivaciones, incluidos aquellos casos en los que hay Estados directa o indirectamente involucrados.
Con doble moral, manipulación, oportunismo y selectividad no se podrá derrotar al terrorismo.”