Ankara, Turquía, 28 de enero de 2019. En la conmemoración del 166 aniversario del natalicio de José Martí, en el parque que lleva su nombre en la capital turca, se congregaron la Subdirectora General para las Américas de la Cancillería, todos los embajadores latinoamericanos acreditados, dirigentes de la principal alcaldía de la ciudad y país –Cankaya-, directivos de la Asociación de Amistad con Cuba “José Martí”, una representación de los cubanos residentes y los integrantes del colectivo de la Embajada cubana.
En el homenaje, se colocaron ofrendas florales ante el busto del Héroe Nacional cubano, esculpido por el artista turco Metin Yurdanur, quien también asistió; y se dirigieron al público el embajador cubano, Luis Amorós Núñez, el presidente de la Asociación de Amistad, Hakan Bulut, y el responsable de Relaciones Internacionales de la Alcaldía aludida, Etem Torunoglu.
Tras resaltar hitos de la vida y obra de Martí, el embajador Amorós ahondó sobre la vigencia del antimperialismo del Apóstol de la independencia cubana, expresado de manera sublime en su carta inconclusa a Manuel Mercado, del 18 de mayo de 1895. Recordó como las alertas de Martí sobre los peligros que entrañaba Estados Unidos para “nuestras tierras de América”, se hicieron realidad poco después de su muerte, y precisamente Cuba se convirtió en territorio pionero de la agresividad norteña.
El diplomático sentenció después: “Hoy, por desgracia, la más dura agresividad estadounidense en la región latinoamericana se reedita bajo la administración actual de la Casa Blanca. Lo demuestran la obstinación de ésta en construir un muro que estigmatiza a sus vecinos latinoamericanos, sus amenazas recientes de ampliar el bloqueo contra Cuba a un nivel inédito, y su aumento de la injerencia y vuelta a la época de las cañoneras en estos días, que pueden convertir a la región en un polvorín encendido”.
Resaltó que la unidad continental seguía pendiente, no obstante los llamados que hizo Martí a la unión latinoamericana y al enfrentamiento conjunto de realidades como: “El desdén del vecino formidable, que no la conoce, es el peligro mayor de nuestra América” o contra el riesgo de “anexión de los pueblos de Nuestra América, al norte revuelto y brutal que los desprecia…”
Los otros dos ponentes resaltaron el legado independentista y revolucionario de José Martí para todo el mundo, y además significaron que la Revolución cubana había hecho realidad tangible los valores e ideales martianos. (EmbaCuba Turquía).