Durante estas conversaciones sostenidas en la Presidencia de la República, en el espléndido hotel Marigny, Jean-Pierre Bel saluda el restablecimiento de un diálogo histórico entre Washington y La Habana. Evoca también la cuestión de las sanciones económicas que constituyen el principal obstáculo a la normalización de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. El expresidente Bel analiza también el viaje de François Hollande a Cuba así como la visita de Estado de Raúl Castro a Francia, y hace un balance de las relaciones actuales entre ambos países. Este intercambio aborda finalmente los lazos entre la isla del Caribe y la Unión Europea y termina con una reflexión sobre la figura de Fidel Castro y la importancia simbólica de Cuba.