Señor Presidente:
Es preocupante e inaceptable el aumento de la xenofobia, el racismo, la discriminación, los discursos de odio y la violencia contra los migrantes, principalmente en los países desarrollados
Rechazamos la aplicación de políticas antiinmigrantes que en lugar de potenciar la contribución de los migrantes como una fuerza económica y social activa, reproducen estereotipos que los marginan.
El mundo observa con vergüenza el trato violento y discriminatorio contra los migrantes en los Estados Unidos, la cancelación de visas de estudiantes extranjeros y el uso de la fuerza y la brutalidad policial contra quienes se han manifestado en defensa de sus derechos.
El uso políticamente motivado por los Estados Unidos de las deportaciones masivas, violentas y racistas de migrantes, muchos de los cuales son de América Latina y el Caribe, constituye una violación flagrante, masiva y sistemática de los derechos humanos.
En ese país los migrantes se han convertido en un nuevo negocio. Mientras expulsan migrantes ilegales violando sus más elementales derechos humanos, venden la residencia permanente por 5 millones de dólares.
El empleo de la base naval de Guantánamo para encarcelar a migrantes es un acto brutal e ilegal que amenaza a la seguridad y la paz de Cuba y de la región.
Resulta más urgente que nunca una real cooperación multilateral en materia de migración internacional, basada en el respeto a la Carta de las Naciones Unidas.
Cuba reitera su compromiso con una migración regular, segura y ordena, en la que se protejan de forma efectiva los derechos humanos de los migrantes, sin discriminación.
Muchas gracias.