Expresa Centro Memorial Martin Luther King su solidaridad al pueblo y gobierno venezolanos.
Coherentes con su inspiración cristiana y un quehacer basado en la promoción de los más genuinos valores del ser humano, el Centro Memorial Martin Luther King –en el contexto de las celebraciones por sus 30 años– envió este jueves, desde su sede, un mensaje de solidaridad al gobierno constitucional del presidente Nicolás Maduro en Venezuela.
Joel Suárez, coordinador ejecutivo de la institución, se refirió en conferencia de prensa al contexto que vive América Latina, matizado por una industria del odio que no admite que los pueblos elijan, de forma legítima, a las personas que representan las ansias populares, así como por una ofensiva del capital transnacional que trata de revertir el camino de esperanzas de la región, rasgo que se manifiesta de manera álgida en la nación venezolana.
Aludió, además, al escenario de medulares transformaciones para el proyecto de país en el cual el centro arriba a su aniversario, como «hijo de la historia singular del movimiento ecuménico cubano», cuya génesis se debe a la iniciativa de la Iglesia Bautista Ebenezer de Marianao, y la labor de los pastores Raúl Suárez y Clara Rodés, así como otros colaboradores.
Tres décadas después de creado, el Martin Luther King «es una asociación macroecuménica, que involucra en su equipo de trabajo a creyentes religiosos y no religiosos, que comparten el mismo horizonte de valores y sentidos», manifestó.
Ejes consustanciales del trabajo, al decir de su coordinador ejecutivo, constituyen contribuir a la participación ciudadana en las comunidades y las iglesias, y fortalecer valores distintivos de la obra de la Revolución –«genuinamente evangélicos y socialistas»– como la solidaridad, la justicia, la honestidad, el respeto, el cuidado de la naturaleza y la no discriminación de las personas…
Y para ello, resultado de los procesos de formación, el centro ha devenido en una «familia en movimiento» con dos tejidos sociales organizados en las redes nacionales de Educadores Populares y la ecuménica Fe por Cuba.
Al respecto, Johana Lezcano, coordinadora del equipo de acompañamiento a la región oriental y miembro de la junta nacional, señaló que los principales resultados se concretan en áreas como la educación superior, Poder Popular, trabajo comunitario, mundo ecuménico, solidaridad con América Latina y economía popular y solidaria, entre otros.
En aras de profundizar, sostuvo que este último trata de generar iniciativas para una economía que no esté basada en la explotación de las personas; al tiempo que la inserción en las comunidades potencia el desarrollo de capacidades en los ciudadanos para que emprendan procesos de transformación, con el sentido de pertenencia y el trabajo colectivo como fundamento.
Según se conoció, otro de los propósitos distintivos del centro está relacionado con mostrar la realidad cubana a diferentes sectores del público estadounidense, y un trabajo se sensibilización sobre los impactos de su política hacia la Mayor de las Antillas, entre ellas el bloqueo económico, comercial y financiero.
La celebración de esta fecha coincide con los cinco años de la Red Ecuménica Fe por Cuba, que al decir de Izzet Samá, miembro de la coordinación colegiada, está integrada por cristianos y cristianas de diferentes denominaciones, apropiados de la propuesta ética de la Educación Popular y la Teología de la Liberación.