Excelencias,
Señora Presidenta,
Miembros de la mesa,
Distinguidos Delegados,
Es nuestro deseo expresarle nuestra satisfacción, a la Exma. Sra. Alicia Buenrostro, Embajadora de México, por su elección al frente de las labores del Sexagésimo primer período de sesiones de la Comisión de Estupefacientes; en particular nos satisface que una representante de la región de América Latina y el Caribe ostente esta posición.
Felicitamos también al resto de la Mesa, deseándoles éxitos al frente de las labores de la Comisión, y asegurándoles que, como siempre, nuestra delegación trabajará con espíritu constructivo y con el ánimo de avanzar en las discusiones.
Nuestra delegación acoge plenamente y acompaña las intervenciones realizadas por los representantes del Grupo de los 77 más China y del Grupo de Estados de América Latina y el Caribe.
Señora Presidenta,
Es nuestro deseo destacar el importante papel que juega la Comisión de Estupefacientes, mandatada como el principal órgano de las Naciones Unidas en el abordaje del Problema Mundial de la Drogas; así como el enorme reto que tiene ante sí para continuar desempeñando su labor sin menoscabo de sus funciones ni duplicidad por otros foros multilaterales.
Reiteramos el apoyo de Cuba al trabajo de la Comisión, en especial, de cara al proceso preparatorio del Segmento Especial de Alto Nivel durante su 62 Período de sesiones, en 2019. Recordemos que fue la fecha en el cual los Estados Miembros nos hemos comprometido para hacer una revisión de los logros alcanzados y los retos que persisten en la aplicación de la Declaración Política de 2009 y su Plan de Acción.
Hacemos notar con satisfacción, que la Sesión Especial de las Naciones Unidas (UNGASS) sobre el problema mundial de las drogas,
en 2016, fue también una excelente oportunidad para intercambiar experiencias, reconocer los esfuerzos desplegados y reafirmar los compromisos asumidos en la Declaración Política y el Plan de Acción de 2009, así como en la Declaración Ministerial de 2014. Igualmente fue un espacio para reiterar la importancia de las tres Convenciones de Naciones Unidas sobre drogas como la piedra angular en el enfrentamiento al Problema Mundial de las Drogas.
Señora Presidenta,
En medio de la compleja situación del uso ilícito de las drogas en el mundo, Cuba mantiene una política de tolerancia cero mediante la implementación de estrategias integrales dirigidas a lograr el equilibrio entre las acciones preventivas y de enfrentamiento. Pese a nuestra ubicación en medio de una zona geográfica de significativo tráfico, nos complace anunciar que la incidencia de las drogas continúa siendo poco significativa en nuestro país; a la vez que se reducen sus efectos en el orden interno como resultado de la voluntad política y compromiso de nuestro Estado y Gobierno.
Coincidimos en que las políticas de control de drogas deben contener un enfoque hacia el bienestar de la persona y una perspectiva de prevención de la violencia y del delito. Asimismo, reconocemos que el uso indebido de drogas es un serio problema de salud pública que requiere políticas que privilegien la prevención, el tratamiento, la rehabilitación y la inserción social.
Consideramos, además, que las estrategias y políticas que se apliquen para el abordaje de dicho problema, deben tener en cuenta las diferentes realidades de cada uno de los Estados Miembros, así como el pleno respeto de su soberanía e integridad territorial y demás principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas.
Señora Presidenta,
Cuba reconoce el papel central que desempeña la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito como centro de las discusiones sobre estos temas en el marco de las Naciones Unidas. Es por ello que deseamos remarcar su papel, y el de sus órganos subsidiarios regionales, para facilitar la cooperación y la asistencia técnica, principalmente en los países menos adelantados.
La cooperación internacional y el intercambio de información útil entre nuestros Estados, sobre bases de confianza mutua y el no condicionamiento, es parte fundamental en el enfrentamiento al problema mundial de las drogas y sus delitos conexos, en el marco que nos ofrecen las tres convenciones sobre las drogas.
Señora Presidenta,
Nuestra Delegación invita a que este sea un espacio para reflexionar sobre el abuso y la dependencia de las drogas, no sólo como un serio problema para la salud de las personas, sino como una amenaza a la seguridad y el progreso económico y social de nuestros pueblos.
El Problema Mundial de las Drogas ha tenido un costo es enorme. Genera y reproduce ciclos de pobreza, violencia, diversas conductas criminales y exclusión social. Refrendamos la importancia de abordarlo bajo el principio de responsabilidad común y compartida. Será muy difícil resolver la producción y tráfico desde el sur empobrecido, sin eliminar la demanda en el norte desarrollado. No se solucionará el problema militarizando países o arrasando campesinos. Tampoco legalizando las drogas, ni asumiéndolas como inofensivas sustancias.
Me permito concluir reiterando el compromiso de nuestro país para cooperar plenamente con la región y con toda la comunidad internacional en el abordaje al Problema Mundial de las Drogas; así como de continuar colaborando con los organismos internacionales en la materia, y cumplir los compromisos asumidos como Estado parte de las tres Convenciones internacionales en vigor.
Muchas gracias.
(Embacuba Austria / Cubaminrex)