71 AGNU: Cuba en el tema: “Mejoramiento de la situación financiera de las Naciones Unidas”, durante la Segunda sesión reanudada de la Quinta Comisión.

Señora Presidenta,

Ante todo, permítanos trasladar la satisfacción de nuestra delegación por verla presidir nuestros trabajos en el 71 periodo de sesiones y reconocer la labor que usted y su equipo han desarrollado en la presidencia de la Quinta Comisión.  Le reitero la cooperación de la delegación de Cuba para llevar a buen puerto nuestros trabajos.  

Agradecemos al Sr. YukioTakasu, Secretario General Adjunto de Gestión, la presentación realizada sobre la situación financiera de la Organización, así como al Sr. Lionel Berridge y al Departamento de Contribuciones por el continuo apoyo que brinda a los Estados Miembros en los temas que hoy nos ocupan.

Nos asociamos al discurso pronunciado por la distinguida delegación de Ecuador a nombre del Grupo de los 77 más China. Adicionalmente, deseamos trasladar algunas cuestiones en capacidad nacional.

Al hacer un análisis comparativo de los últimos años, vemos que el alcance y la complejidad de los programas y operaciones de Naciones Unidas han variado notablemente. La Organización actualmente gestiona el mayor número histórico de misiones y personal de mantenimiento de la paz desplegados. Debido a las circunstancias internacionales del presente, dependen de las Naciones Unidas el mayor número de personas desplazadas de sus hogares que en ningún otro momento desde que se fundara.

Asistir a todos sus Estados Miembros, a llegar a cada uno de sus nacionales para brindarles una mejor opción de vida y derechos, es hoy más que nunca un objetivo ambicioso, pero loable. Son alentadores los acuerdos alcanzados en materia de desarrollo sostenible y cambio climático. Si bien no es todo a lo que se pudiera aspirar, no podemos dejar de reconocer que la Agenda 2030 que tenemos hoy es la más ambiciosa que ha existido.

Todos estos esperanzadores compromisos y acuerdos internacionales hay que materializarlos y concretarlos. Para ello, no se puede concebir una Organización debilitada y sin recursos para llevar a cabo los mandatos que los Estados Miembros le ha encomendado. El compromiso político de los Estados Miembros lleva implícito también la voluntad para financiar las funciones y actividades de la Organización. Consecuentemente, los Estados Miembros deben pagar sus cuotas de manera puntual, íntegra y sin condiciones.

Es preocupante que las mayores deudas del conjunto de los presupuestos de las Naciones Unidas continúan concentrándose alrededor de un mismo Estado Miembro, quien coincidentemente es el mismo que se beneficia de la principal distorsión en la metodología para el cálculo de la escala de cuotas y es el mayor beneficiario de las actividades de adquisiciones de las Naciones Unidas; además de los beneficios que representa la presencia de la Organización en su territorio.

La acumulación de cuotas atrasadas tiene efectos negativos en la capacidad de la Organización para cumplir sus mandatos y genera inestabilidad financiera.

Reiteramos el llamado a la Secretaría a hacer todos los esfuerzos por minimizar el impacto de las presiones financieras y garantizar un manejo consecuente y eficiente de los recursos financieros puestos a su disposición. Consideramos además que la prioridad en el trabajo de la Organización y la asignación de los escasos recursos deben dirigirse a la aplicación de los mandatos acordados por los Estados Miembros y no a iniciativas administrativas, las cuales deben ser plenamente justificadas antes de ponerse en marcha.

Señora Presidenta,

Es bien conocido que Cuba ha denunciado reiteradamente, en el contexto de la Quinta Comisión, la persistencia de medidas coercitivas unilaterales. Estas son contrarias al Derecho Internacional y obstaculizan el cumplimiento de sus compromisos de pago a Cuba y a otros varios países en desarrollo. Estas medidas coercitivas unilaterales violan asimismo los acuerdos que la ONU mantiene con el país sede.

A pesar de la cooperación del personal de la Secretaría de Naciones Unidas para colaborar con mi delegación, la ejecución de los pagos a los presupuestos de la Organización sigue siendo un reto para Cuba, debido a la aplicación de las regulaciones del Bloqueo Económico, Comercial y Financiero que unilateralmente Estados Unidos ha impuesto a mi país por más de 50 años.

El bloqueo violenta el Derecho Internacional, los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y las normas del libre comercio. Es el sistema de sanciones unilaterales más injusto, severo, prolongado y abarcador que se ha aplicado contra país alguno.

Este entramado de medidas y regulaciones dificulta y entorpece también la materialización de los compromisos financieros de Cuba con los Organismos Internaciones, a pesar de la total voluntad de honrarlos. 

Cuba espera que la nueva administración estadounidense sea receptiva al clamor casi unánime de la comunidad internacional que exige el fin de esta criminal política  y reitera su disposición al diálogo y  a la cooperación sobre bases de absoluto respeto a nuestra soberanía

Reiteramos una vez más el compromiso de la delegación de Cuba con el multilateralismo, el fortalecimiento del sistema de las Naciones Unidas y su apropiado funcionamiento.

Muchas gracias.