Señora Presidenta;
Agradecemos la convocatoria a esta reunión y reiteramos las sinceras condolencias de Cuba por los recientes desastres naturales que han golpeado con fuerza varias regiones del planeta.
El embate cada vez más devastador y frecuente de desastres naturales, confirman al cambio climático como una amenaza a la supervivencia de la humanidad y al desarrollo sostenible de los pueblos.
Cuba reafirma que resulta impostergable la implementación y el seguimiento de importantes documentos internacionales en esta esfera como el Marco de Acción de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres; las Modalidades de Acción Acelerada para los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (PEID) (Samoa Pathway); el Acuerdo de París y la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible, bajo el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas.
Creemos que la comunidad internacional, de manera particular los países desarrollados, deben honrar sus compromisos y su responsabilidad ecológica con la humanidad y las generaciones futuras. Es imperativo incrementar la cooperación internacional y la transferencia de tecnologías a los países en desarrollo, sin lo cual no podrá haber avances significativos en la reducción de los riesgos de desastres a nivel mundial.
Se requiere del compromiso de todos los Estados, pero especialmente de los que cuentan con mayores recursos y niveles de desarrollo, teniendo en cuenta que las tareas de reducción del riesgo de desastres demandan grandes inversiones y tecnologías de punta. Debe promoverse la ayuda y la transferencia de conocimientos y tecnologías hacia los países y territorios que por sus condiciones geográficas y escasos recursos, enfrentarán los mayores desafíos frente al cambio climático.
Reafirmamos, asimismo, la necesidad del fortalecimiento de la solidaridad,la cooperación e integración internacional y regional en materia de reducción del riesgo de desastres.Cuba continuará priorizando la colaboración internacional en esta esfera, así como el intercambio de experiencias y buenas prácticas en la prevención y el enfrentamiento a los desastres naturales. El Congreso Internacional sobre Desastres, cuya décima edición se realizará el próximo año en Cuba, será una buena oportunidad para el fomento de iniciativas en este sentido.
Señora Presidenta;
Recientemente nuestro país fue afectado por los devastadores efectos del huracán Irma, que dejó a su paso cuantiosos daños. El pueblo y gobierno cubanos continúan realizando un colosal esfuerzo hacia la recuperación. Contamos también con el valioso apoyo brindado por el Sistema de Naciones Unidas (SNU) en Cuba.
Aprovecho la ocasión para reiterar el agradecimiento profundo, por la ayuda y las disímiles y sentidas muestras de afecto recibidas de diversos gobiernos y naciones hermanas.
Reiteramos la disposición de Cuba de seguir apoyando de forma solidaria y desinteresada a los países afectados por desastres naturales que lo necesiten, como lo demuestra la labor desarrollada por el Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias “Henry Reeve”, que recibió este año el Premio de la Salud Pública Mundial de la OMS como reconocimiento a su labor solidaria en distintas regiones del mundo.
Señora Presidenta;
Por su ubicación geográfica, Cuba está expuesta al impacto de eventos naturales. Ello ha condicionado que la reducción del riesgo de desastres constituya una prioridad para el gobierno cubano insertada en nuestras políticas de desarrollo a corto, mediano y largo plazo y sustentada en un sólido marco legal e institucional que vela por su cumplimiento.
Cuba ha demostrado cuánto se puede lograr en la reducción del riesgo de desastres, incluida la protección de la población y sus bienes, con pocos recursos y a pesar del bloqueo impuesto por el gobierno de los Estados Unidos desde hace más de 50 años. Los resultados alcanzados han sido posibles a partir de la firme voluntad política del gobierno cubano y la participación activa de todo el pueblo.
Para ello, ha resultado fundamental el fortalecimiento del Sistema de Defensa Civil, con un enfoque basado en la prevención y en la educación, centrado en la participación integrada de todas las instancias y actores nacionales, para proteger a las personas, sus bienes y la infraestructura social y económica.
En ese sentido, se vela por el constante perfeccionamiento de los sistemas nacionales y locales de alerta temprana y la efectividad de las medidas de protección.
Señora Presidenta;
Avanzar en la reducción del riesgo de desastres nunca ha sido tan urgente en el marco de la implementación de la Agenda 2030. Deseamos reafirmar el compromiso y disposición de Cuba en pos de esta meta colectiva.
Muchas gracias.
Misión Permanente de Cuba ante las Naciones Unidas.