Señor Presidente:
Suscribimos la intervención realizada por la delegación de Azerbaiyán a nombre del Movimiento de Países No Alineados.
Felicitamos a Vietnam por el ejercicio de la presidencia del Consejo de Seguridad en el mes en curso, y a los 5 nuevos miembros no permanentes del Consejo de Seguridad para el período 2020-2021. Les deseamos éxitos en esta responsabilidad.
Reconocemos el trabajo realizado por las delegaciones de Guinea Ecuatorial, Cote d' Ivoire, Kuwait, Perú y Polonia, como miembros no permanentes del Consejo de Seguridad en el período 2018-2019.
Señor Presidente:
Saludamos la celebración de este debate abierto a nivel ministerial, que resulta oportuno y necesario.
Las Naciones Unidas y su Carta, surgieron por la necesidad imperiosa de salvar al mundo de otra guerra mundial y con el objetivo permanente de garantizar la paz, la seguridad, la dignidad y el desarrollo para todos los pueblos del mundo. En el año de su 75 aniversario, reiteramos el firme compromiso de Cuba con la defensa de los propósitos y principios de la Carta, que constituyen la base del multilateralismo, una de las principales fuentes del Derecho Internacional y la guía para la actuación de los Estados en sus relaciones internacionales.
Sin embargo, las continuas transgresiones a la Carta y los quebrantamientos del Derecho Internacional, incluido el uso y la amenaza del uso de la fuerza contra Estados soberanos, las agresiones contra la soberanía de otras naciones y la injerencia en los asuntos internos de los Estados, siguen siendo hechos cotidianos.
Rechazamos las guerras no convencionales con fines de dominación hegemónica, los intentos de reimponer un orden unipolar, el asesinato selectivo de líderes extranjeros, el saqueo y robo de recursos naturales, la imposición de medidas coercitivas unilaterales, la extraterritorialidad, las sanciones unilaterales, las presiones de todo tipo y todas aquellas agresiones que atentan contra el multilateralismo, quebrantan la paz y la estabilidad e irrespetan las disposiciones de la Carta de las Naciones Unidas.
Señor Presidente:
El Consejo de Seguridad debe desempeñar sus funciones conforme a las facultades que le fueron conferidas en la propia Carta de preservar la paz y la seguridad internacionales, pero debe hacerlo sin dobles raseros ni discriminación, y siempre apegado a la justicia y los principios.
Por lo tanto, es el deber de todos trabajar para favorecer soluciones pacíficas y ejercer una resistencia firme, eficaz y meridiana contra la guerra. En particular, este órgano principal de la Organización debe agotar todas las vías que permitan la preservación de la paz y de la vida, e impedir que se promuevan y apliquen la filosofía del despojo, las agendas de cambio de régimen o se intente conculcar el derecho de los pueblos a la libre determinación. Debe promover un orden internacional justo, democrático y equitativo, que responda al reclamo de paz, desarrollo y justicia de los pueblos de todo el mundo y contribuya al pleno cumplimiento de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Debe defender el multilateralismo y rechazar cualquier propuesta que constituya una intromisión del Consejo en los asuntos asignados a otros órganos principales de la Organización, en especial la Asamblea General.
Se requiere una Organización de las Naciones Unidas realmente fuerte y participativa, con un Consejo de Seguridad transparente y debidamente democratizado, y una Asamblea General revitalizada, que acompañe a los Estados en la construcción soberana del futuro que decida para sí cada nación sin interferencias de tipo alguno.
Señor Presidente:
En Cuba hemos luchado por la paz, hemos cooperado con otros muchos pueblos en la búsqueda de una vida mejor y hemos defendido a ultranza nuestra independencia y soberanía. Jamás nos ha amedrentado ni doblegado, ni nos doblegará, el ilegal y criminal bloqueo económico, comercial y financiero que por casi seis décadas ha impuesto el gobierno de Estados Unidos a nuestra pequeña isla, recrudecido con una brutal guerra económica y la completa aplicación de la Ley Helms Burton; desoyendo el reclamo de la comunidad internacional, que ha rechazado esa política y exigido que se le ponga fin por 28 ocasiones consecutivas en la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Como expresara el presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez, “Cuba adoptará todas las medidas que resulten necesarias para frenar los propósitos intervencionistas de los Estados Unidos, proteger la tranquilidad y el bienestar de la población, salvaguardar la unidad nacional y defender, al precio que sea necesario, la soberanía y la independencia del país”.
Nuestro país continuará contribuyendo, con sus limitados recursos, con toda su energía y con una voluntad inquebrantable, al bienestar de otros pueblos, sobre todo de los más necesitados, brindando cooperación internacional para el desarrollo sostenible con inclusión. Cuba continuará comprometida con la defensa de la Carta de la ONU, en favor de la paz y la seguridad internacionales.
Muchas gracias.