Señor Presidente:
Mi delegación desea sumarse a la intervención realizada por Indonesia, en nombre del Movimiento de Países No Alineados.
Cuba aboga por el legítimo derecho de todos los Estados a acceder al espacio ultraterrestre en condiciones de igualdad y sin discriminación; y a beneficiarse de la cooperación en materia de capacitación y transferencia de aplicaciones y tecnología espaciales.
La amenaza de una carrera armamentista en el espacio ultraterrestre, el continuo desarrollo y perfeccionamiento del armamento espacial y la presencia de material bélico en el espacio, atentan contra la realización de las aspiraciones de los pueblos, en particular de los países más pequeños, de beneficiarse del potencial de las tecnologías espaciales para la implementación de Agenda 2030.
Cuba rechaza el argumento de que algún país necesite disponer de armas avanzadas en el espacio para proteger su economía, estilos de vida e incrementar su competitividad.
Rechazamos además la declaración de los Estados Unidos de que "el espacio es un dominio de guerra" y los intentos de convertirlo en el próximo campo de batalla.
La creación del Comando Espacial de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos y la militarización del espacio ultraterrestre y el ciberespacio constituyen una grave amenaza a la seguridad de todos y al futuro de la humanidad.
Resulta muy preocupante la utilización de las tecnologías espaciales en detrimento de la seguridad de las naciones, incluida la nutrida red de satélites espías existente, que además de ser incompatible con la paz y el desarrollo, continúa saturando la órbita geoestacionaria con gran cantidad de desechos espaciales.
Señor Presidente:
Debemos impedir a tiempo que el espacio ultraterrestre se convierta en un nuevo teatro de operaciones militares.
Urge fortalecer el régimen jurídico aplicable con la adopción de un tratado multilateral para la prevención y prohibición del emplazamiento de armas en el espacio. En opinión de Cuba, ese instrumento debe prohibir también el uso o la amenaza de uso de la fuerza contra satélites u otro tipo de objetos espaciales.
Como hemos expresado en ocasiones anteriores, el proyecto de tratado presentado por Rusia y China en la Conferencia de Desarme es una buena base para las negociaciones necesarias de un instrumento internacional jurídicamente vinculante.
Lamentamos que Estados Unidos haya bloqueado el consenso en la adopción del informe final del Grupo de Expertos, establecido por la Asamblea General, para presentar recomendaciones sobre los elementos sustantivos de un instrumento legalmente vinculante para la prevención y prohibición de la carrera de armamentos en el espacio. Resulta desalentadora su falta de voluntad política y su compromiso con los tratados multilaterales que ha suscrito y los principios sobre la exploración y uso pacífico del espacio exterior.
Debemos cerrar la puerta a los usos militares del espacio y a su militarización; así como a toda posibilidad de un conflicto armado.
Reconocemos el valor práctico de las medidas voluntarias de transparencia y fomento de la confianza en el espacio ultraterrestre. De hecho, Cuba respalda y promueve la política de no primer emplazamiento de armas de ningún tipo en ese medio. Estas medidas, no obstante, no sustituyen a un instrumento legalmente vinculante.
Por último, alentamos a preservar el espacio ultraterrestre como patrimonio común de la humanidad y a implementar los compromisos políticos en consonancia con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, asumidos en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre la Exploración y la Utilización del Espacio Ultraterrestre con Fines Pacíficos.
Muchas Gracias