76 AGNU: Debate General del Grupo de Trabajo Especial sobre la Revitalización de la Labor de la Asamblea General. Nueva York, 9 de marzo de 2022

Señor Presidente:

En primer lugar, deseamos felicitar a los Representantes Permanentes de El Salvador y Australia, por su designación como Co-presidentes de este proceso durante el 76 periodo de sesiones.

Mi delegación se suma a la intervención realizada por Argelia, a nombre del Movimiento de Países No Alineados.

Señor Presidente:

Cuba participó de manera activa en las negociaciones de la resolución A/RES/75/325 sobre revitalización, adoptada por consenso. Consideramos que un avance importante de esta resolución fue la decisión de bienalizarla, según se estipula en su párrafo operativo 5. De esta manera, durante la actual sesión, nos podremos enfocar en acciones que hagan avanzar la importante tarea de revitalizar la labor de esta Asamblea.

Tal como mandata dicha resolución, así como lo han solicitado los Copresidentes, centraremos nuestra intervención en los temas ‘‘Función y Autoridad de la Asamblea General’’ y ‘‘Métodos de Trabajo’’, con un enfoque hacia implementación.

Al abordar estos aspectos, debemos tener presente el pleno respeto de las disposiciones y normativas que establece la Asamblea General, incluido su Reglamento, como una responsabilidad compartida y de estricto cumplimiento.

Si bien reconocemos el papel del uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones en la labor de la Organización, resaltamos el carácter excepcional de los métodos de trabajo adoptados por la Asamblea General durante la pandemia de COVID-19. Como se indica en la resolución A/RES/75/325, el reglamento de la Asamblea General continúa proporcionando la orientación general para su labor.

Como se conoce, la Asamblea es el primer órgano establecido y regulado en la Carta de las Naciones Unidas y su autoridad, funciones y poderes, le vienen dadas por dicho instrumento legal y su carácter democrático y representativo de toda la comunidad internacional.   

Por consiguiente, las propuestas que se realicen para implementar los mandatos de la resolución A/RES/75/325, no deben socavar los intereses soberanos de los Estados, ni atentar contra sus privilegios y derechos.

Igualmente, las Comisiones Principales, que tienen un importante papel en el proceso de revitalización, deberán examinar las propuestas que les correspondan de manera holística y en los tiempos requeridos.  De no hacerlo, ello redundaría en el innecesario retraso de nuestras deliberaciones y resultados.

Por otro parte, la interacción y coordinación entre la Asamblea General, el Consejo de Seguridad y el Consejo Económico y Social, es vital para el proceso de revitalización en curso.

Estos tres órganos principales deben mantener un adecuado equilibrio, conforme a lo establecido en la Carta. En ese sentido, y como hemos dicho en otras ocasiones, debe cesar la creciente tendencia del Consejo de Seguridad de invadir el ámbito de acción de la Asamblea General.

Acogemos con beneplácito la incorporación de un párrafo en la resolución sobre la importancia de que el Consejo de Seguridad siga esforzándose por presentar su informe anual a la Asamblea. Al respecto, instamos al Consejo a que presente a la Asamblea General un informe anual más exhaustivo y analítico sobre sus trabajos, que permita evaluar las causas e implicaciones de las decisiones de ese órgano.

Por otra parte, mi delegación apoya el llamado de la resolución sobre revitalización a limitar el número de eventos de alto nivel que se celebran en forma paralela al debate general, a aquellos de importancia fundamental que requieran la atención inmediata de los Jefes de Estado y de Gobierno. Para cumplir ese objetivo, que tiene como fin preservar y fortalecer la primacía del Debate General, se debe analizar caso por caso y en consulta con los Estados Miembros.

Señor Presidente:

La eficacia y eficiencia de la Asamblea General no puede determinarse por la racionalización de sus trabajos, y mucho menos por la eliminación de temas y resoluciones de su agenda. Ese es un enfoque parcializado, con el que mi delegación no está de acuerdo.

Garantizar la sostenibilidad de la confianza de la comunidad internacional en las Naciones Unidas y la legitimidad de ésta, dependerá de que la Organización sea capaz de responder a los intereses colectivos, de la gran mayoría de sus Estados Miembros y en particular de sus pueblos.

Pueden contar con  la disposición de mi delegación para trabajar en el proceso de revitalización de la Asamblea General, para consolidar su carácter democrático y participativo y con ello el multilateralismo.

Muchas gracias