Señor Presidente:
Cuba se adhiere plenamente a la intervención pronunciada a nombre de la CELAC.
El proceso de descolonización, que posibilitó la autodeterminación y la independencia de numerosos pueblos y territorios bajo dominación colonial es considerado como una de las transformaciones más significativas del siglo XX.
No obstante, es urgente la materialización de mecanismos multilaterales para erradicar ese flagelo que aún padecen varios territorios, entre ellos los 17 registrados en el Comité Especial de Descolonización de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Cuba se suma al llamado internacional de poner fin al colonialismo, a 61 años de la aprobación de la histórica “Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales”, adoptada por la Asamblea General mediante su resolución 1514(XV).
En 2020 la Asamblea General aprobó la resolución 75/123, en la cual se proclamó el Cuarto Decenio Internacional para la Eliminación del Colonialismo. Es momento de reforzar nuestros vínculos y esfuerzos coordinados para avanzar hacia la erradicación de este flagelo, a la mayor brevedad posible.
Señor Presidente:
Es imprescindible señalar a la atención de la Cuarta Comisión la situación de la Palestina ocupada y asediada, cuyo pueblo tiene el inalienable derecho a la autodeterminación y a la existencia de un Estado independiente y viable con Jerusalén Oriental como su capital, la Palestina que desea no se extienda por otros 50 años la pesadilla de la ocupación extranjera que su pueblo padece desde 1967. Las Naciones Unidas, especialmente el Consejo de Seguridad, están en deuda con el pueblo palestino. Favorecemos y apoyamos los pasos necesarios para que Palestina adquiera su plena membresía como Estado de las Naciones Unidas, a la mayor brevedad posible.
Asimismo, Cuba defiende el derecho del pueblo del Sahara Occidental a la libre determinación sobre la base del respeto a los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas, el Derecho Internacional y las resoluciones pertinentes de la ONU.
Hace 58 años el Comité Especial de Descolonización de las Naciones Unidas declaró el Sáhara Occidental como territorio no autónomo.
Cuba aboga por una solución política mutuamente aceptable entre las partes, que prevea el ejercicio a la libre determinación del pueblo del Sahara Occidental de conformidad con la resolución 1514 (XV) de las Naciones Unidas sobre la concesión de la independencia de los países y pueblos coloniales.
Por otra parte, no favorecemos las decisiones unilaterales que desconozcan los intereses o derechos del pueblo saharaui.
El pueblo saharaui requiere apoyo de la comunidad internacional y podrá contar siempre con la solidaridad del pueblo de Cuba.
Expresamos, una vez más, el irrestricto apoyo al legítimo derecho de la República Argentina en la disputa de soberanía relativa a las Islas Malvinas, Georgia del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, que constituyen parte del territorio nacional de ese hermano país latinoamericano. Reiteramos el llamado a una solución negociada, justa y definitiva a la cuestión de las Malvinas en el plazo más breve posible, que tome en cuenta tanto el respeto a la integridad territorial de la Argentina, como el reconocimiento de los intereses de los habitantes de las Islas. Recalcamos además que mientras no se logre una solución definitiva de la disputa mediante negociaciones, no deben producirse actos unilaterales que introduzcan modificaciones en la situación de las Islas.
Señor Presidente:
El 25 de julio de 2022 se cumplieron 124 años de la intervención de los Estados Unidos de
América en Puerto Rico. Sin embargo, tantos años de dominio colonial no han sido suficientes para arrebatarle al pueblo de Puerto Rico su cultura, su identidad y sus sentimientos nacionales.
Este 2022 se cumplieron 50 años desde la adopción de la primera resolución sobre la cuestión colonial de Puerto Rico. A pesar de ello y de los múltiples esfuerzos desplegados por Comité Especial de Descolonización, el pueblo de Puerto Rico continúa sin poder ejercer su legítimo derecho a la genuina autodeterminación.
Estados Unidos de América, la potencia colonial, trata por todos los medios de afianzar su dominio económico, político y social sobre este hermano pueblo latinoamericano y caribeño.
Ya suman 39 resoluciones o decisiones sobre el tema adoptadas por el Comité. En todas y cada una de esas resoluciones y decisiones, se ha reafirmado el derecho inalienable del pueblo de Puerto Rico a la libre determinación y a la independencia, de conformidad con la resolución 1514 (XV) de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
El Estado Libre Asociado en Puerto Rico, impuesto hace más de 60 años, no fue más que una farsa y la forma encontrada por el Gobierno de los Estados Unidos para ejercer su total dominación sobre esta hermana isla antillana y enmascarar un acto de clara dominación colonial.
La farsa política montada hace más de medio siglo y denunciada por los patriotas puertorriqueños y por quienes apoyamos su causa ha sido desmontada por la Corte Suprema de los Estados Unidos, el Congreso y hasta la propia la Administración, cuando de manera clara e inequívoca señalaron que Puerto Rico carece de soberanía propia y está sujeto completamente a los poderes de Washington, o sea, es una posesión norteamericana, un territorio colonial.
En la pasada Cumbre de la Comunidad de Estados de América Latina y del Caribe, celebrada en septiembre de 2021 en Ciudad de México, las Jefas y Jefes de
Estados allí reunidos, reiteraron que se trata de un asunto de alto interés para la CELAC, insistieron en el carácter latinoamericano y caribeño de Puerto Rico y se comprometieron a seguir trabajando en el marco del Derecho Internacional para poner fin rápida e incondicionalmente al colonialismo en todas sus formas y manifestaciones en la región de América Latina y el Caribe.
Señor Presidente:
La Revolución Cubana ha mantenido un permanente compromiso con la solidaridad hacia otros pueblos, y en la medida de sus posibilidades ha colaborado con los habitantes de territorios no autónomos, basado en la premisa de compartir lo que tenemos y no lo que nos sobra, a pesar del brutal bloqueo económico, comercial y financiero que ha tenido que enfrentar el pueblo cubano y que en los tiempos que corren, de crisis sanitaria y económica global, se ha visto recrudecido de manera muy intencionada, como resultado de la política de máxima presión que el gobierno de los Estados Unidos impone contra nuestra Isla.
En las escuelas y universidades cubanas han estudiado, por ejemplo, cientos de jóvenes del Sahara Occidental. La cooperación con los habitantes de los territorios no autónomos es esencial para el bienestar colectivo de ellos y para el necesario desarrollo económico y social de estos territorios. Exhortamos a todos los Estados Miembros a contribuir con esta importante tarea.
Cuba reitera su inquebrantable compromiso con la erradicación del colonialismo y recuerda que mientras exista un solo pueblo bajo esa condición, el trabajo de la Organización estará inconcluso.
Muchas gracias.