Señor Presidente:
Suscribimos la intervención de Indonesia en nombre del Movimiento de Países No Alineados.
Las iniciativas regionales y subregionales en materia de desarme y control de armamentos contribuyen de forma sustantiva al propósito de alcanzar un mundo más seguro, al complementar los esfuerzos y negociaciones multilaterales en esta esfera.
Nuestra región tuvo un papel pionero en la materia, al convertirse en la primera área densamente poblada del mundo declarada como Zona Libre de Armas Nucleares, mediante el Tratado de Tlatelolco. Todos los países latinoamericanos y caribeños son Parte del TNP y del CTBT. Somos también la región con el mayor número de Estados Parte y signatarios del Tratado para la Prohibición de las Armas Nucleares.
Para Cuba, ello es motivo de orgullo, al tiempo que nos compromete a continuar abogando de forma decidida por el desarme general y completo.
La adopción de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, en enero de 2014, en ocasión de la II Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), refrendó la vocación pacifista de nuestra región.
Reiteramos nuestro irrestricto compromiso con los postulados de la Proclama, los cuales mantienen hoy plena vigencia. Seguiremos actuando de conformidad con sus disposiciones, que deben conducir las relaciones entre los Estados miembros de la CELAC y de estos con el resto del mundo.
Estados Unidos continúa siendo la mayor amenaza a la paz, la seguridad y la cooperación entre los países de América Latina y el Caribe. Preocupa que aun mantenga declaraciones interpretativas a los Protocolos Adicionales I y II del Tratado de Tlatelolco. Su actuación irresponsable también vulnera la seguridad en otras regiones del mundo.
Estamos seguros de que las zonas libres de armas nucleares contribuyen a la consecución del desarme nuclear, fortalecen el régimen de no proliferación nuclear y favorecen el mantenimiento de la paz y la seguridad regional e internacional.
Por este motivo, abogamos por el establecimiento de Zonas Libres de Armas Nucleares en diferentes países y regiones del mundo. Apoyamos la Conferencia sobre el establecimiento de una Zona Libre de armas nucleares y otras armas de destrucción en masa en el Medio Oriente.
Para que las Zonas Libres de Armas Nucleares puedan cumplir los propósitos para los cuales fueron establecidas, se precisa que las potencias nucleares actúen de conformidad con las responsabilidades que les competen, respeten los estatutos de dichas zonas y retiren a la mayor brevedad las reservas y declaraciones interpretativas formuladas a los tratados que fundan estas zonas y sus protocolos.
Cuba continuará siendo fiel defensor de la paz y la seguridad regional e internacional. Seguiremos exigiendo la plena observancia de los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, el Derecho Internacional y los postulados de la Proclama de Paz.
Muchas gracias.