Señor Presidente:
Suscribimos la declaración de Indonesia en nombre del Movimiento de Países No Alineados.
El espacio ultraterrestre no debe ni puede convertirse en un teatro de operaciones militares. Los Estados miembros tenemos el deber de promover su uso responsable estrictamente con fines pacíficos. Nos oponemos al desarrollo de una carrera armamentista en el espacio ultraterrestre, al continuo perfeccionamiento del armamento espacial y a la presencia y emplazamiento de material bélico en el espacio. Rechazamos cualquier amenaza o uso de la fuerza en el espacio ultraterrestre.
Las tecnologías espaciales no pueden usarse como medio para vulnerar la soberanía de las naciones. Nos preocupa la nutrida red de satélites espías existente, que resulta incompatible con la paz y el desarrollo de los pueblos y continúa saturando la órbita geoestacionaria con desechos espaciales.
Señor Presidente:
Urge fortalecer el régimen jurídico aplicable al espacio ultraterrestre. Apoyamos la negociación y pronta adopción de un tratado multilateral que contemple la prevención y prohibición del emplazamiento de armas en el espacio. Dicho instrumento debería prohibir también el uso o la amenaza de uso de la fuerza contra satélites u otro tipo de objetos espaciales.
El proyecto de tratado presentado por Rusia y China en la Conferencia de Desarme es una buena base para las negociaciones de un instrumento internacional jurídicamente vinculante.
Respaldamos y promovemos la política de no primer emplazamiento de armas de ningún tipo en el espacio ultraterrestre. En tal sentido, consideramos que las medidas voluntarias de transparencia y fomento de la confianza en ese medio son pertinentes, pero no sustituyen la adopción de un instrumento legalmente vinculante en la materia.
Señor Presidente:
Debe respetarse el legítimo derecho de todos los Estados a acceder al espacio ultraterrestre en condiciones de igualdad y sin discriminación; y a beneficiarse de la cooperación en materia de capacitación y transferencia de aplicaciones y tecnología espaciales.
Las tecnologías especiales deben contribuir a las genuinas aspiraciones de paz y desarrollo de todos los pueblos y al cumplimiento de los objetivos y metas contempladas en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
Las presentes generaciones tenemos el deber moral de preservar el espacio ultraterrestre como patrimonio común de la humanidad; así como de promover su uso pacífico en beneficio de las generaciones futuras.
Muchas gracias