Intervención de Cuba en el debate abierto trimestral del CS sobre la situación en el Medio Oriente incluida la cuestión palestina

Señor Presidente:

Respaldamos la intervención realizada por Azerbaiyán en nombre del Movimiento de Países No Alineados y del Representante Permanente de Senegal, en su calidad de Presidente del Comité para el ejercicio de los derechos inalienables del pueblo palestino.

Reiteramos nuestra profunda preocupación por el impacto de la Covid-19 en los países del Medio Oriente. En particular, la situación socioeconómica y humanitaria del pueblo palestino que continúa agravándose. El enfrentamiento a la pandemia exige acciones mancomunadas que privilegien la cooperación y la solidaridad, por encima de las diferencias políticas.

Es lamentable que, en medio de este complejo escenario, el Consejo de Seguridad continúe sin adoptar medidas para poner fin a la agresión militar y la ocupación israelí del territorio palestino, incluida Jerusalén Oriental, conforme a su resolución 2334 (2016). 

Reafirmamos la enérgica condena a los bombardeos indiscriminados del Estado de Israel contra la población palestina en Gaza el pasado mes de mayo, que ocasionaron la pérdida de centenares de vidas y cuantiosos daños materiales.

Estas agresiones constituyen otra grave y flagrante violación de la Carta de las Naciones Unidas, el Derecho Internacional y el Derecho Internacional Humanitario por parte de Israel, que continúa la ocupación y consolida sus políticas de anexión, aumenta sus ilegales prácticas y medidas colonizadoras, incluidas la construcción y expansión de asentamientos en el territorio palestino ocupado, las demoliciones punitivas, el desplazamiento forzoso de cientos de civiles, el bloqueo de la Franja de Gaza y los planes de anexión de los territorios palestinos del Valle del Jordán y otras partes de Cisjordania y de Jerusalén Oriental.

Estas deplorables acciones israelíes cuentan con la complicidad y la impunidad que le garantizan los Estados Unidos, cuyo gobierno obstaculiza la acción del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Llamamos una vez más a este órgano a que cumpla la responsabilidad que le otorga la Carta de las Naciones Unidas en el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, y exija el fin inmediato de la ocupación de los territorios palestinos; así como el cumplimiento de las resoluciones sobre la situación en el Medio Oriente, incluida la cuestión Palestina.

Ratificamos nuestro apoyo irrestricto a una solución amplia, justa y duradera del conflicto israelo-palestino, que permita al pueblo palestino ejercer el derecho a la libre determinación y disponer de un Estado independiente y soberano en las fronteras anteriores a 1967, con Jerusalén Oriental como su capital y que garantice el derecho al retorno de los refugiados.

Expresamos nuestra invariable solidaridad con el pueblo y gobierno palestinos. Respaldamos el ingreso del Estado de Palestina como miembro pleno de las Naciones Unidas y el llamado de su Presidente a la celebración de una conferencia internacional de paz.

Señor Presidente:

Las acciones agresivas, unilaterales e injustificadas de Estados Unidos en el Medio Oriente vulneran severamente los intereses legítimos de las naciones árabes e islámicas y conllevan a una peligrosa escalada en la región.

Reiteramos nuestro rechazo al llamado “Acuerdo del Siglo”, elaborado por el gobierno estadounidense, en el que se desconoce la solución de dos Estados, que ha contado con el respaldo histórico de las Naciones Unidas, el Movimiento de Países No Alineados, la Liga de Estados Árabes, la Organización para la Cooperación Islámica y otros actores internacionales.

La decisión unilateral del gobierno de Estados Unidos de reconocer a Jerusalén como capital de Israel, de establecer su representación diplomática en esa ciudad, irrespetando su estatuto histórico, así como de reconocer la soberanía de Israel sobre el Golán Sirio, constituyen graves violaciones de la Carta de las Naciones Unidas, del Derecho Internacional y de las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad. Esperamos que el actual Gobierno revierta tales decisiones que, lejos de ayudar, alejan aún más la posibilidad de una solución negociada.

Reclamamos, una vez más, la retirada total e incondicional de Israel del Golán sirio y de todos los territorios árabes ocupados.

Apoyamos la búsqueda de una solución pacífica y negociada a la situación impuesta a Siria, sin injerencia externa y con pleno respeto a su soberanía e integridad territorial. Reiteramos nuestra más enérgica condena a la implementación de la “Ley Cesar”, que obstaculiza la reconstrucción de ese país, aún más, en el complejo escenario de la COVID-19.

Ratificamos nuestro pleno apoyo al Plan de Acción Integral Conjunto con Irán y el rechazo a la retirada de Estados Unidos del Acuerdo.

Demandamos el fin inmediato y sin condicionamientos de las arbitrarias e ilegales medidas coercitivas unilaterales impuestas contra Estados soberanos, en violación de los derechos humanos de sus pueblos, el Derecho Internacional y la Carta de las Naciones Unidas, y que generan dificultades adicionales en el actual contexto de enfrentamiento a la pandemia.

Señor Presidente:

Reiteramos nuestro respaldo al llamado urgente del Secretario General de las Naciones Unidas a poner fin a los conflictos armados, las hostilidades y las guerras y en su lugar abrir oportunidades para la diplomacia y la cooperación, que nos permitan enfrentar juntos esta devastadora pandemia. El derecho a la paz continúa siendo prioridad fundamental.

Es deber de todos los Estados y, en particular de los miembros del Consejo de Seguridad, la defensa del multilateralismo y de los propósitos y principios de la Carta de la ONU incluidos el respeto a la igualdad soberana de los Estados, a su independencia política, unidad e integridad territorial y a la no injerencia en sus asuntos internos; la solución pacífica de las controversias y abstenerse del uso o la amenaza del uso de la fuerza en las relaciones internacionales.

Muchas gracias.

Nueva York, 28 de Julio de 2021