Intervención de Ernesto Soberón Guzmán, Embajador, Representante Permanente de Cuba ante la ONU, en Reunión de Alto Nivel de la AGNU sobre la Revisión General de la Implementación de los Resultados de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información

Presidente:

Excelencias:

Cuba se alinea con el discurso pronunciado por Iraq, a nombre del G77 y China y quisiera añadir lo siguiente en capacidad nacional.

La Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información, que celebramos en su 20 aniversario, estableció de forma clara la conexión entre las tecnologías de la información y las comunicaciones y el desarrollo.

Los países en desarrollo logramos que se reconociera la brecha digital como una nueva manifestación de las desigualdades estructurales. La Cumbre llevó este asunto del ámbito técnico a la agenda política multilateral.

Hoy, dos décadas después, se ha demostrado, sin lugar a dudas, que las tecnologías digitales son herramientas fundamentales para el desarrollo de los países.

Sin embargo, también se ha confirmado que el impacto positivo de estas tecnologías es considerablemente menor en los países en desarrollo en comparación con los países desarrollados.

Esta desigualdad no es casual. Es el resultado de un orden económico internacional injusto y antidemocrático, así como de la implementación de medidas coercitivas unilaterales, que van en contra del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas, limitando el desarrollo en los países afectados.

En el caso de Cuba, el ilegal bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el gobierno de los Estados Unidos por más de seis décadas, constituye el principal obstáculo a nuestro desarrollo tecnológico, económico y social. Nos impide adquirir tecnología, acceder a financiamientos, y participar plenamente en la economía global del conocimiento.

Por lo tanto, subrayamos que es urgente eliminar las barreras estructurales que impiden que las tecnologías digitales emergentes contribuyan al cumplimiento de la Agenda 2030.

Para lograrlo, los esfuerzos de los países en desarrollo no son suficientes. Estos deben ser respaldados por acciones concretas que faciliten el acceso a mercados, financiamientos en condiciones justas y preferenciales, transferencia de tecnologías sin condiciones y una genuina cooperación Norte-Sur.

La alineación en la implementación de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, el Pacto para el Futuro y el Pacto Digital Global ofrece una oportunidad para avanzar en esta dirección y fortalecer la cooperación internacional.

Sin embargo, es fundamental que el marco de seguimiento y examen sea racional e inclusivo, fortaleciendo los espacios intergubernamentales para que todos los gobiernos, en especial los de los países en desarrollo, puedan desempeñar sus roles y responsabilidades en la gobernanza digital a nivel global. Es imprescindible que los países del Sur participen activamente en las discusiones sobre decisiones que les afectan directamente.

Presidente:

Excelencias:

La Declaración de Principios, de la primera fase de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información estableció una visión compartida de construir “una Sociedad de la Información centrada en la persona, integradora y orientada al desarrollo…”, donde todos tengan la oportunidad de crear, compartir y utilizar el conocimiento para mejorar sus vidas.

Lamentablemente ese noble propósito continúa siendo una aspiración para gran parte de la humanidad.

Nos corresponde ahora hacer realidad esa visión común que fue avizorada hace más de 20 años.

¡Hagamos de la Sociedad de la Información no una promesa incumplida, sino un derecho efectivo para todos los pueblos!

Muchas gracias.