Francia, 21 de noviembre. La delegación cubana presente en la 40 Conferencia General de la UNESCO ha desarrollado una activa participación en el seguimiento de los trabajos de sus comisiones, durante la semana que casi concluye. Cabe destacarse, la presencia de la Viceministra del Ministerio de Ciencias, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), América Santos, y de la especialista de la Comisión Nacional Cubana de la UNESCO (CNCU), Ivianes González, quienes participaron en la Comisión de Ciencias Sociales y Humanas, que sesionó durante los días 20 y 21 del actual mes.
En su intervención, la Viceministra Santos reconoció como experiencia positiva la celebración el pasado año de la Escuela MOST Subregional del Caribe "Construyendo sociedades resilientes mediante puentes entre la investigación y la adaptación al cambio climático en el Caribe", organizada en La Habana. En este sentido, destacó la integración novedosa lograda entre los programas de ciencias de la UNESCO, así como el involucramiento activo de las Comisiones Nacionales y las Oficinas en el terreno de los países del Caribe, en esta iniciativa regional que resultó un ejemplo concreto y positivo de los beneficios de la cooperación sur-sur y de la contribución de la UNESCO desde su mandato para su fortalecimiento. De igual forma, se refirió a la realización en La Habana, del 3 al 5 de diciembre próximo, de la III Escuela MOST "Promoviendo el liderazgo de los Jóvenes en la Reducción del Riesgo de Desastres y la Adaptación al Cambio Climático en el Caribe", que también representará un importante esfuerzo en la coordinación y colaboración a nivel subregional.
Por su parte, la especialista González al apoyar la iniciativa de la UNESCO de establecer principios éticos que guíen los avances en el ámbito de la Inteligencia Artificial (IA), reconoció la importancia de la IA como parte indispensable del desarrollo científico tecnológico. En este contexto, expresó “el problema hoy no es la IA, sino el uso que se haga de ella, de modo que los valores éticos y los aspectos legales que establecen los principios, la obligatoriedad de cumplimiento y las normas coercitivas a quien las viole, resultan fundamentales”. Se requiere, dijo, una “profunda comprensión e incorporación de la ética en todo el diseño de la tecnología, que los valores sociales y morales no sean vistos como simples factores de riesgo o restricciones, sino como los principales impulsores y moldeadoras de la innovación y por tanto, deberían estar incorporados en los sistemas inteligentes desde el primer momento de su concepción”, concluyó.
La participación de Cuba en estos debates es una muestra fehaciente del compromiso del país con la UNESCO, así como un modo de reafirmar la disposición de seguir colaborando con la Organización a favor del desarrollo sostenible.
Delegación Permanente de Cuba ante la UNESCO