Nueva York, 17 de noviembre de 2025. — La delegación de Cuba, representada por el Embajador Ernesto Soberón Guzmán, Representante Permanente ante las Naciones Unidas, intervino este 17 de noviembre en el debate abierto del Consejo de Seguridad dedicado a la inseguridad alimentaria relacionada con los conflictos, destacando la urgencia de una acción internacional efectiva para enfrentar este flagelo que continúa afectando a millones de personas en el planeta.
Durante su intervención, el diplomático cubano expresó solidaridad con las naciones del continente africano que aún sufren las consecuencias históricas del colonialismo, conflictos prolongados y desigualdades estructurales, cuyos impactos se reflejan en el atraso del desarrollo y en los crecientes niveles de inseguridad alimentaria. Subrayó que el informe anual del sistema de Naciones Unidas estima entre 638 y 720 millones de personas afectadas por el hambre en 2024, cifra que representa entre el 7,8 % y el 8,8 % de la población mundial, alertando que las perspectivas hacia 2030 no resultan alentadoras, a pesar de estar a apenas cinco años del cumplimiento de la Agenda 2030.
El Embajador Soberón resaltó la necesidad de fortalecer la cooperación multilateral, subrayando el rol central de la Asamblea General, el Programa Mundial de Alimentos, la FAO, UNICEF, la OMS y otras agencias especializadas en la materialización de los compromisos globales. Igualmente, alertó sobre estudios recientes que confirman que los conflictos armados constituyen el principal detonante de la inseguridad alimentaria aguda, afectando actualmente a 140 millones de personas en 20 países y territorios.
Asimismo, denunció de forma contundente la dramática situación en la Franja de Gaza, donde más de 500 000 personas se encuentran en condiciones de hambruna. Señaló que, aun tras el cese al fuego, persisten severos obstáculos para la entrada de ayuda humanitaria, mientras el 98,5 % de las tierras agrícolas se encuentran destruidas o inaccesibles, lo que agrava la emergencia alimentaria. Alertó con firmeza que el hambre está siendo utilizada como arma de guerra contra el pueblo palestino, responsabilizando a Israel por crímenes de genocidio, exterminio y limpieza étnica, apoyado con impunidad política y financiamiento militar por el Gobierno de los Estados Unidos.
Finalmente, Cuba reiteró que el planeta dispone de recursos suficientes para garantizar alimentos y desarrollo con justicia social, pero estos son concentrados y derrochados por las grandes potencias en armamentos y políticas hegemónicas. En ese sentido, el Embajador Soberón llamó a instaurar un nuevo orden económico internacional justo, equitativo y democrático, capaz de erradicar de raíz las desigualdades globales, la pobreza extrema y todo factor estructural que continúe alimentando conflictos, inestabilidad y crisis humanitarias.
Misión Permanente de Cuba ante las Naciones Unidas.
