INTERVENCION DE S.E. SRA. MARGARITA GONZALEZ FERNANDEZ, MINISTRA DE TRABAJO Y SEGURIDAD SOCIAL DE LA REPUBLICA DE CUBA, EN LA SESION PLENARIA DE LA 107ª REUNION DE LA CONFERENCIA INTERNACIONAL DEL TRABAJO.
Ginebra, 4 de junio de 2018.
Sr. Presidente:
Distinguidos Ministros y delegados,
El compromiso de la OIT de promover la justicia social y asegurar el disfrute de los principios y derechos fundamentales en el mundo del trabajo, tienen pleno respaldo en la agenda y los documentos que serán analizados en esta reunión. Coincidimos con lo planteado por el Director General en su Memoria sobre la necesidad y oportunidad para dar un nuevo impulso a la igualdad de género en el trabajo, teniendo en cuenta, como bien se reconoce y documenta, que falta mucho todavía para alcanzar un objetivo tan loable.
Sr. Presidente:
En Cuba desde el triunfo de la Revolución, lograr la igualdad de género es una prioridad del Gobierno, que se respalda desde la Constitución y tiene su expresión en numerosas disposiciones jurídicas que aseguran los derechos de la mujer; entre los que se destacan la salud, la educación, el acceso al empleo, la igualdad en la remuneración, la seguridad social y la superación técnica y cultural.
Transcurridos más de cincuenta años, las mujeres cubanas desempeñan un papel esencial en la vida política, económica y social del país, lo que se refleja en cifras concretas de participación:
- Son el 53.2% de los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular;
- El 48.4% de los integrantes del Consejo de Estado, 3 de sus 5 vicepresidentes y el 35% de los ministros;
- También son el 48% de los trabajadores del sector estatal civil y dentro de estos el 78.5% del personal de la salud, el 48% de los investigadores científicos y en general constituyen el 66.8% de la fuerza de mayor calificación técnica y profesional del país.
No obstante, se continúa trabajando en el cambio de los patrones culturales, para que se comparta cada vez más el cuidado de la familia entre hombres y mujeres; por ampliar y perfeccionar los servicios institucionales destinados al cuidado de niños y adultos mayores; así como la protección a la maternidad, entre otras medidas dirigidas a facilitar la participación de la mujer, en todos los espacios de la sociedad.
El país ha continuado perfeccionando su modelo de desarrollo económico y social, con el objetivo de construir una nación soberana, independiente, socialista, democrática, próspera y sostenible, para elevar cada vez más la calidad de vida, el bienestar y la justicia social de nuestro pueblo, a pesar de que el bloqueo económico, financiero y comercial que se ejerce contra Cuba persiste y provoca considerables afectaciones a la economía, limitando el desarrollo.
Sr. Presidente:
Consideramos que la OIT puede continuar aportando en la lucha por la igualdad de género en el trabajo y en la sociedad, promoviendo proyectos que permitan la integración del mundo del trabajo con las múltiples facetas del desarrollo sostenible para todos, sin desechar las experiencias positivas, pero buscando enfoques nuevos e innovadores, como se plantea en la Memoria.
Ratificamos el apoyo a este noble propósito y ponemos a su disposición nuestras modestas experiencias.
Muchas gracias.