El anuncio hecho por el Secretario de Estado Michel Pompeo de incluir a Cuba en la lista unilateral del Departamento de Estado como Estado patrocinador del terrorismo es cínico e insidioso. Es la serpiente que muerde su propia cola. Porque los hombres y mujeres amantes de la paz y de la justicia saben perfectamente que los Estados Unidos de América, desde el triunfo de la Revolución Cubana, han emprendido actos de terrorismo en todas sus formas contra ese país hermano.
Quien no recuerda la explosión en pleno vuelo del avión de la compañía de Cubana de Aviación, que causó la muerte de 73 personas. Los instigadores confesos de este acto odioso se pavonean libremente en suelo de los Estados Unidos.
Quien no recuerda el reciente ataque a la Embajada de Cuba en Washington en mayo pasado. Acto vil y cobarde que, lamentablemente, no ha causado pérdidas de vidas humanas, sino graves. El Gobierno de los Estados Unidos no ha reaccionado con firmeza ante esta agresión, ni siquiera haciendo uso de los usos y prácticas diplomáticas hacia el Gobierno cubano.
Conociendo, Cuba y su política oficial, que se lleva a cabo sin trabas, este país no puede ser calificado por nadie como un Estado patrocinador de terrorismo. Por ello, nosotros, los miembros del Comité de Amistad Congo-Cuba, reunidos en el seno de la Asociación Congoleña de Amistad entre los Pueblos (ACAP), rechazamos y condenamos con desprecio toda maniobra encaminada a manipular un tema tan sensible, por groserías y oportunismo político.
Reiteramos nuestro inquebrantable apoyo al pueblo y amigos de Cuba, para que sepan que Cuba no está sola ni aislada. Cuba puede contar con miles de amigos que tiene aquí en nuestro querido Congo.
Brazzaville, 13 de enero de 2021.