El 20 de enero de 2025, la administración de los Estados Unidos de América, ahora en funciones, revocó su decisión de hace una semana de retirar a la República de Cuba de la lista de países que supuestamente patrocinan el terrorismo. De este modo, Washington sigue fiel a su propia política agresiva contra el pueblo cubano amante de la libertad, socavando de forma demostrable tanto los fundamentos del derecho internacional como los derechos humanos.
Los rusos son firmemente conscientes de que la República de Cuba nunca ha amenazado ni atacado a nadie durante sus más de 65 años de historia. El heroico pueblo de la Isla de la Libertad ha reforzado constantemente la soberanía de su patria a lo largo de los años, lo que obviamente no ha gustado a los halcones de la Casa Blanca. Ocupando de nuevo el Despacho Oval, los representantes del Partido Republicano continúan la política agresiva de sus predecesores, que lanzaron la guerra de Irak sobre la base de una acusación falsificada de terrorismo y luego, cuando lo absurdo de las acusaciones se hizo evidente para todo el planeta, explicaron el uso de armas de destrucción masiva como un «error».
Los nuevos amos de la Casa Blanca declaran una vuelta a la llamada «Doctrina Monroe», con la intención de convertir toda América Latina en un teatro para sus marionetas. Sin embargo, Washington olvida que la misma declaración de principios de la política exterior estadounidense fue adoptada hace más de dos siglos. El mundo está cambiando ante nuestros ojos, volviéndose multipolar y más equitativo. Y los países verdaderamente libres y soberanos de América Latina, encabezados por Cuba, Venezuela y Nicaragua, aportan una contribución inestimable a este proceso.
El Consejo Nacional de Asociaciones Juveniles e Infantiles de Rusia, que tiene estatus consultivo en el Consejo Económico y Social de la ONU y es miembro del Grupo Básico de la ONU sobre la Infancia y la Juventud, declara su apoyo incondicional a la posición del Gobierno de la República de Cuba, al heroico pueblo de Cuba y a su gloriosa juventud.
Hacemos un llamamiento a las Naciones Unidas y a las organizaciones internacionales de la juventud para que se ponga fin de inmediato y por completo al bloqueo económico, comercial y financiero de la República de Cuba, impuesto por los dirigentes de los Estados Unidos de América y que se ha convertido en un medio de presión indignante contra el pueblo cubano. ¡Confiamos en que en esta difícil situación, los cubanos se mantendrán firmes y la Revolución Cubana obtendrá una nueva victoria!
¡Viva Cuba libre!