Moscú, 28 de octubre. El llamamiento correspondiente de la Duma Estatal a la Asamblea General de la ONU fue aprobado por unanimidad en la sesión plenaria. La postura de los diputados sobre el embargo contra Cuba se mantiene inalterada. Según Vyacheslav Volodin, estas medidas constituyen un intento de quebrantar la voluntad del pueblo cubano.
La Duma Estatal aprobó por unanimidad un llamamiento a la Asamblea General de las Naciones Unidas, a los parlamentos de los estados miembros de la ONU y a las organizaciones parlamentarias internacionales sobre la necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero de la República de Cuba.
El Presidente de la Duma Estatal recordó que la Asamblea General de la ONU adopta anualmente resoluciones sobre la necesidad de poner fin al embargo contra Cuba, las cuales cuentan con el apoyo de la abrumadora mayoría de los miembros de la Organización. Afirmó que estas medidas constituyen un intento de quebrantar la voluntad del pueblo cubano: las restricciones obstaculizan el desarrollo de Cuba y causan daños a su economía que ascienden a cientos de miles de millones, y si consideramos el efecto acumulativo, a billones de dólares.
La postura de los diputados de la Duma Estatal sobre el embargo a Cuba se mantiene inalterada y es categóricamente negativa. «Acciones de este tipo contra un Estado soberano contradicen directamente los principios fundamentales del derecho internacional, como la no injerencia en los asuntos internos, la resolución pacífica de controversias, el respeto de los derechos humanos y la obligación de los Estados de cooperar entre sí», afirma el documento.
En su opinión, las restricciones son “un instrumento injusto e inaceptable de política exterior que causa un daño significativo al bienestar de los ciudadanos cubanos, obstaculiza su desarrollo socioeconómico y desestabiliza la situación en la región”.
El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra la República de Cuba constituye una violación sistemática de normas y principios fundamentales del derecho internacional moderno. Esta política contradice directamente el espíritu y la letra de la Carta de las Naciones Unidas. Las sanciones económicas a gran escala impuestas para ejercer presión sobre un Estado soberano son ilegales, subraya la declaración. (EmbaCuba Rusia)
