Moscú, 7 de mayo. El Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y el presidente del Partido Comunista de la Federación de Rusia, Guennadi Ziugánov, sostuvieron en Moscú, en la mañana de este miércoles, un afectuoso intercambio. El mandatario cubano fue distinguido con la Medalla en memoria de los 80 años de la Gran Victoria sobre el fascismo.
El Jefe de Estado cubano habló a su interlocutor sobre cuánto significa para la delegación de alto nivel que ha llegado al país euroasiático, estar en esta hora en tierra rusa para tomar parte en las celebraciones por el aniversario 80 de la Gran Victoria del pueblo ruso sobre el fascismo; y estar presentes en la nación hermana cuando, este 8 de mayo, se cumplen 65 años del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
«Le damos mucha importancia a esta celebración, a la magnitud que va tomando, a la significación que tiene». Díaz-Canel así lo enunció porque, en su entender, se están viviendo tiempos en los que se pretende minimizar el aporte de la Unión Soviética a la Gran Guerra Patria, en un momento –reflexionó– en que se acrecienta la filosofía neofascista.
Por lo anterior –argumentó el Jefe de Estado–, se hace muy importante el trabajo con la memoria histórica. «El pueblo cubano conoce la verdad histórica», recalcó, y subrayó que la Segunda Guerra Mundial fue una conflagración de rapiña, y que la victoria soviética fue una victoria por la soberanía, por la liberación nacional de los pueblos.
«Ahí está –valoró– el heroísmo del pueblo soviético, el heroísmo del pueblo ruso»; y trajo a colación la idea del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz acerca de que la batalla de los soviéticos fue por la humanidad, y también por Cuba.
El dignatario dijo al presidente del Partido Comunista de la Federación de Rusia ser portador de un mensaje afectuoso, de un saludo hacia él, del General de Ejército Raúl Castro Ruz, y también del primer ministro Manuel Marrero Cruz. Destacó «el esfuerzo y el apoyo» de Guennadi Ziugánov en aras de que todos los consensos alcanzados entre la parte cubana y el presidente Vladímir Putin puedan marchar adelante.
El apoyo que la Federación de Rusia da a la Mayor de las Antillas en su lucha contra el bloqueo imperial fue una posición que el mandatario cubano agradeció en el intercambio. Al presidente del Partido Comunista de la hermana nación, el Jefe de Estado dijo: «Creo que estamos en un excelente momento de las relaciones que se están profundizando». E hizo énfasis en «la alegría por estar con ustedes».
«Estimado señor Presidente y querido amigo…», lo saludó Ziugánov, antes de agradecer al Presidente Díaz-Canel y a «todo su equipo de trabajo por siempre apoyar en el fortalecimiento de los vínculos entre los dos Partidos».
El dirigente comunista no pasó por alto que el militarismo creciente y la filosofía del capital llevaron al holocausto del fascismo, ese que costó millones de vidas al pueblo soviético. Expresó que hoy muchos países no comprenden el altísimo costo que tuvo para la nación soviética esa contienda de la Segunda Guerra Mundial: compartió el detalle histórico de que uno de cada dos soldados caídos en el frente de combate era militante comunista.
«Nos vamos a ver el día del Desfile. Le deseo muchos éxitos en su visita», afirmó Ziugánov, quien aprovechó el encuentro para distinguir a Díaz-Canel con la Medalla en memoria de los 80 años de la Gran Victoria.
La jornada de intercambio cerró con la firma, por parte de representantes de ambos Partidos Comunistas, de una Hoja de Ruta cuyo contenido son acciones para poner en práctica los acuerdos tomados el pasado año, en aras del acercamiento entre las dos organizaciones políticas. (Embacuba Rusia-Presidencia)